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Tecnología al servicio del individuo

JUSTA MEDIANÍA

David E. León Romero
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Por:

Aterrizar en alguna ciudad de Estados Unidos y recibir de inmediato un mensaje de texto en tu celular, no requiriendo un servicio de Internet ni saldo en la línea, para enterarte que debes de resguardarte de la tormenta de nieve que amenazará en las próximas horas la zona que visitarás, resulta información realmente valiosa para el individuo.

Para finales del 2023, en México existían poco más de 140 millones de líneas de teléfonos móviles; con ello en mente, dimensionemos la gran utilidad que puede tener alertar a los usuarios de los riesgos que representa el territorio que ocupan utilizando sus equipos como canal de comunicación, sin obligarlos a tener saldo o ciertos servicios contratados. Desafortunada o afortunadamente, un gran número de mexicanos vive literalmente pegado a su teléfono celular, lo que en este caso representa una gran ventaja, para hacer llegar mensajes importantes y oportunos, sin tener que citar al individuo frente a la radio o la televisión.

La tecnología citada lleva por nombre cell broadcast system y consiste en enviar mensajes especiales a los usuarios, con base en el espacio geográfico en el que se encuentran, de esta forma, resulta sencillo alertar a todos los individuos que ocupan un territorio que en un futuro será impactado por un huracán —u otro fenómeno— a través de las antenas que se encuentran ubicadas en el sitio en cuestión.

Tal y como sucede en Estados Unidos, Canadá, Japón y Nueva Zelanda, hoy México se encuentra en proceso de perfeccionar la utilización de esta tecnología, probada en días pasados durante el Simulacro Nacional, lo que permitirá una mucho mejor comunicación con los individuos para gestionar de mejor forma los posibles eventos de emergencia o desastre.

Este gran logro ha sido producto del esfuerzo y la gestión adecuada de mujeres y hombres pertenecientes a distintas instituciones empeñadas en proteger a la población. El proceso inició hace varios años con la relevante participación del personal de la Coordinación Nacional de Protección Civil, de la Secretaría de Gestión Integral del Riesgo (encabezada de manera exitosa por Myriam Urzúa), y de la Agencia Digital de Innovación Pública del Gobierno (comandada en su momento por Pepe Merino, y hoy por Eduardo Clark, ambos servidores públicos ejemplares), estas dos últimas dependencias pertenecientes al Gobierno de la Ciudad de México, involucrando a las empresas concesionarias de telefonía celular y a distintas instituciones del gobierno federal y local.

Resulta esperanzador imaginar los proyectos que a nivel nacional podrán planear y ejecutar, servidores públicos que concretaron programas y políticas realmente exitosas a nivel local, y que seguramente con el liderazgo de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, serán replicados en todo el territorio nacional.

Es la tecnología un elemento que nos une y que debe ser aprovechado por todos. Felicidades a quienes de una u otra forma han sido parte de este gran logro.