Un nuevo estudio publicado recientemente en Science y realizado por científicos multidisciplinarios internacionales bajo el liderazgo de Chris Turney, de la Universidad de Nueva Gales, arrojó evidencia sobre las condiciones apocalípticas provocadas por una inversión de los polos magnéticos de la Tierra, combinada con cambios en el comportamiento del Sol. La última gran inversión geomagnética desencadenó una serie de eventos que tuvieron consecuencias de gran alcance para nuestro planeta: la capa de ozono fue destruida, las tormentas eléctricas arrasaron los trópicos, los vientos solares generaron auroras, el aire ártico se derramó sobre América del Norte, las capas de hielo y glaciares aumentaron, los patrones climáticos cambiaron violentamente y se extinguieron cientos de especies entre las que destacan los neanderthales y la megafauna se extinguieron, mientras que los humanos modernos buscaron protección en las cuevas. En la investigación se estudió al árbol más antiguo conocido hasta ahora, el ejemplar vivió hace 42,000 años.
Gráficos: Ismael F. Mira, Roberto Alvarado y Luisa Ortega.