Cuando hay una problemática en el sector educativo, deriva en una cascada de apoyo por parte de más sindicatos; esto es lo que se puede esperar respecto a las huelgas en la Universidad Autónoma Chapingo (UACh), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN), consideró la académica Claudia Aldana.
“Si no hay una negociación pronta y que satisfaga a los académicos y a los trabajadores de la educación, sí va a venir la oleada de levantamientos, porque sí están siendo escuchados por este nuevo gobierno”, advirtió en entrevista con La Razón la docente de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Aseveró que las protestas no solamente están justificadas, sino que son necesarias para señalar las deficiencias presupuestales: “(las universidades) necesitan levantar la voz para ser escuchadas y para hacer saber la gravedad del aspecto de la educación que se está viviendo”.
Además, comentó que lo que distingue a estas protestas de las de otros años es que conllevan esperanza, porque han “visto cambios o medidas reales en relación a las propuestas del nuevo gobierno”.
Sin embargo, consideró que hay un periodo de transición y hay crisis, debido a que hay reajustes y se vive una etapa en la que “ni está funcionando lo nuevo, ni se acaba de abandonar lo viejo”.
Admitió que existe corrupción en las instituciones educativas, porque son un reflejo del país, ”el cual está invadido por la corrupción en todos los niveles”.
Pedro Flores, investigador del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de la Educación (INIDE), de la Universidad Iberoamericana, añadió que se debe reflexionar respecto a los motivos que han generado malas prácticas en el financiamiento y en el mal comportamiento de agentes universitarios.
“Es muy importante ver lo que ha generado estos malos comportamientos y hacer una reflexión sobre esas políticas de financiamiento de las universidades, de vinculación y extensión y evaluación. Hay que comentar de manera colectiva este tipo de acontecimientos, para evitar que las universidades sean presionadas”, expresó.
EN UAM SIGUEN SIN ACUERDOS. A 26 días de estallar la huelga, el Sindicato independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM), y autoridades de la institución no llegaron a un acuerdo en la séptima mesa de negociación y el paro laboral continúa afectando a 58 mil alumnos.
El rector Eduardo Peñalosa reiteró, a través de la página oficial de la institución, que la universidad puede ofrecer un aumento salarial de 3.35 por ciento para todos los trabajadores y tres por ciento de tabulación a los trabajadores administrativos de base y al personal de medio tiempo y tiempo parcial, así como 4.28 por ciento de incremento del vale de despensa.
Aseguró que una vez que se levante la huelga, será posible discutir en el colegio académico, donde están representados los diferentes sectores de la universidad, los temas prioritarios.
Finalmente, dijo estar convencido de que se logrará superar los desafíos de este proceso y de que la universidad saldrá fortalecida y continuará con sus tareas con base en el compromiso que siempre ha demostrado.
Ayer, trabajadores de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) rechazaron un incremento salarial de uno por ciento y adelantaron que el jueves definirán si se convierten en la cuarta institución en esa situación.
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