El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el rescate de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ante el intento de los “neoliberales corruptos que querían destruirlas” lo están realizando con el apoyo de los trabajadores y de empresas que quieren recuperar su prestigio, como ICA.
Así lo comentó al realizar una visita a la planta coquizadora en la refinería de Tula, en Hidalgo, donde destacó que este tipo de acciones permitirán que México deje de comprar combustibles en el extranjero.
Acompañado por los titulares de la secretaría de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O; de Energía, Rocío Nahle, y de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, destacó que reiniciar el proyecto de la planta coquizadora implicó “enderezar entuertos”.
Señaló que la obra la dejaron caer en el sexenio pasado por corrupción en la que incluso estuvo involucrada Odebrecht, por lo que para recuperarla se requirió una inversión de 60 mil millones de pesos.
El titular del Ejecutivo federal destacó que esta plantea reactivará la economía de Tula –se prevé que generará entre 6 mil y 8 mil empleos directos en la región– y aseguró que estará lista para finales de 2023, lo que contribuirá a que México ya no compre gasolina en el extranjero.
En ese sentido, el Presidente de la República señaló que todas estas obras forman parte del rescate de Pemex y de CFE, para lo que cuentan con el respaldo de los trabajadores y también de las empresas que buscan recuperarse después de que perdieron su prestigio por los periodos de corrupción.
Hay empresas como ICA y otras empresas que están en una etapa nueva y quieren recuperar el prestigio que tuvieron a nivel internacional y se fue perdiendo durante los periodos de corrupción que imperaron en el país y ahora estas empresas están actuando acorde con el gobierno que encabezo y que tiene como premisa fundamental no permitir la corrupción, que haya negocios, que haya utilidades racionales, que no haya atracosAndrés Manuel López Obrador, Presidente de México
RFH