Estados Unidos

Prohíben la interrupción del embarazo tres estados

Kentuky, Luisiana y Dakota del Sur, los primeros que lo ponen en marcha; otros 3 de la Costa Oeste anuncian “ofensiva” para defender el aborto

En Nueva York, como en otras ciudades del país, la decisión de la Corte generó protestas en defensa del aborto, ayer. Foto: Reuters

Tras la decisión de la Corte Suprema de anular el derecho constitucional al aborto, estados liberales anunciaron un bloque en defensa de esta prerrogativa, mientras que otros prohibieron la interrupción del embarazo ayer mismo. Esta situación provocó que clínicas en entidades liberales decidieran cancelar los procedimientos para evitar problemas legales.

Los gobernadores demócratas de California, Washington y Oregon anunciaron una una “ofensiva de la Costa Oeste” para proteger los derechos reproductivos y ayudar a las mujeres que viajen a esos estados en busca de practicarse un aborto.

Los estados emitieron un “compromiso multiestatal” conjunto, afirmando que colaborarán para defender a las pacientes y a los profesionales médicos que prestan servicios de salud reproductiva.

También se comprometieron a “proteger contra cooperación judicial y de las fuerzas del orden locales con investigaciones, pesquisas y detenciones fuera del estado” en relación con los abortos realizados en sus estados.

Algunas pacientes se derrumbaron y no podían hablar entre sus sollozos. Algunas pacientes estaban atónitas y no sabían qué decir. Otras no entendían lo que ocurría
Katie Quinonez, Directora de clínica de abortos en Virginia

En contraparte, Kentucky, Luisiana y Dakota del Sur prohibieron la interrupción del embarazo ayer mismo, apenas se conoció la decisión del tribunal. Idaho, Tennessee y Texas también la aprobaron de forma automática, aunque sus efectos no entrarán en vigor hasta dentro de 30 días.

Trece estados, principalmente del sur y el centro —los más religiosos y conservadores—, han adoptado en los últimos años las llamadas leyes zombie o “gatillo”, redactadas para entrar en vigor automáticamente en caso de un cambio en la jurisprudencia de la Corte Suprema. En otros, como Arkansas o Mississippi, el fiscal general primero tendrá que confirmar que la Corte ha cambiado el marco legal.

Esta situación provocó que clínicas en estados como Alabama, Texas y Virginia Occidental dejaran de realizar abortos por temor a ser procesadas judicialmente, haciendo que las pacientes se fueran de sus instalaciones con lágrimas en los ojos.

“Algunas pacientes se derrumbaron y no podían hablar entre sus sollozos. Algunas pacientes estaban atónitas y no sabían qué decir. Otras no entendían lo que ocurría”, dijo Katie Quinonez, directora ejecutiva de la única clínica donde se practica el aborto en Virginia Occidental, cuyo personal se dedicó a llamar a decenas de pacientes para cancelar sus citas.