Con la novedad de que el tren El Insurgente, que correrá de Toluca a la Ciudad de México finalmente no será entregado antes de que termine la actual administración. Esa obra, que empezó a construirse en el sexenio de Peña Nieto y se dejó a medias para luego ser retomada por el Gobierno de López Obrador ha presentado montones de problemas y conflictos que han impedido su terminación en los plazos originalmente establecidos y ha generado incrementos de costos. Ayer el Presidente López Obrador aclaró: “Ese tren lo vamos a inaugurar a finales de agosto, principios de septiembre, hasta la estación Santa Fe, porque de Santa Fe, a Tacubaya, a Observatorio —tramo que corresponde a la CDMX—, sí, hemos tenido algunas dificultades, también por cuestiones políticas, y es compleja la obra, es bastante compleja, lleva puentes atirantados”. Parece que, de principio a fin, esa obra por complicaciones no para. Uf.
