Con la ventaja de ser la nación de América más avanzada en inmunización (90.87 por ciento) Covid, Chile garantizó el retorno de visitantes extranjeros en medio de la pandemia, sólo si cuentan con seguro médico de cobertura por el SARS-CoV-2, apertura que ya aplican naciones europeas como Grecia e Italia.
El gobierno andino resaltó que entrarán a una fase de convivencia con el virus lo que les permite reabrir más de la mitad de sus 40 puntos fronterizos. principalmente con Argentina, y recibir, de nuevo, a miles de visitantes y residentes extranjeros como parte del Plan de Normalización tras un cierre de casi dos años.
Y aunque contempla extremar precauciones en los pasos a la nación, descarta solicitar comprobantes de esquema completo Covid o la obligatoriedad de someterse a pruebas PCR, como ocurría hasta el momento, pero podrían realizar éstas de manera aleatoria en la frontera.
El gobierno de Gabriel Boric puntualizó que para ingresar a lugares públicos, en donde renovarán el aforo permitido, sí será necesario contar con el llamado “pase de movilidad” a fin de reducir el riesgo sanitario.
En torno a este paso en la misma semana en que Estados Unidos dijo que ya avanzó a una fase endémica, el gobierno vecino de Perú resaltó que con este cambio la región podría verse beneficiada para aumentar el turismo y reactivar la economía, uno de los principales reclamos contra la gestión de Pedro Castillo.
Y destacaron que a diferencia de Chile ellos sí demandarán el certificado Covid, de tres inyecciones, o en su defecto una prueba PCR de 48 horas previas al viaje, al recordar que en su territorio se han registrado muchas más muertes que en el vecino con 212 mil contra 57 mil, casi la cuarta parte que la otra región, mientras que en contagios manejan cifras similares con 3.5 millones de positivos desde que comenzó la emergencia sanitaria.
En tanto, en Europa los gobiernos de Grecia e Italia se dicen listos para ampliar el ingreso de turistas, previo a las vacaciones de verano, y en el primer caso prevén levantar restricciones severas contra viajeros nacionales.
En ambos casos se pondrá fin a la documentación que acredita su inmunización; sin embargo, prevén ajustes en el uso de mascarillas, pues aunque en el transporte público seguirá siendo obligatorio, en espacios cerrados como centros comerciales y cines podría no ser indispensable.
Dichas acciones son aplaudidas por ciudadanos que reconocen hartazgo por las restricciones que se han prolongado por más de dos años, pues con estos cambios se siente una esperanza de que han superado la fase de riesgo de esta pandemia, mientras que el gobierno griego estima que esta apertura les permitirá alcanzar hasta 80 por ciento de las visitas que tenían antes de hallar este virus.