Se lanza contra acerera en la que se refugiaban

Ataca Rusia a civiles en el último bastión ucraniano

Reportan intensos bombardeos en Azovstal e invasores justifican acciones por supuesto cese el fuego; evacuados de Mariupol arriban a Zaporiyia y el Papa ofrece dialogar con Putin

Civiles arriban ayer a Zaporiyia, luego de escapar de Mariupol dos días antes. Foto: AP

A la vez que ofreció dialogar con Ucrania, Rusia emprendió una nueva ofensiva contra la siderúrgica de Azovstal, uno de los últimos bastiones en resistencia, lo que va en contra del acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para permitir la salida de quienes siguen atrapados, dejando decenas de heridos.

Sin importar que en el sitio seguían escondidos unos 200 civiles, los estruendos resonaron nuevamente en la acerera de Mariupol, en un intento de asalto en represalia por un supuesto cese el fuego, del que responsabilizaron a Ucrania, como parte de su avance hacia zonas clave, de las que busca tomar control para arrebatar territorio a Volodimir Zelenski.

Horas después del artero ataque, la viceministra ucraniana, Irina Vereshchuk, reveló que al menos 40 de sus fuerzas armadas resultaron heridas y urgió todo el apoyo para sacar al mayor número de víctimas de la zona.

Ese mismo día, la ONU confirmó que 127 personas que huyeron de Azovstal y zonas cercanas llegaron a Zaporiyia luego de una travesía de dos días y un recorrido de más de 200 kilómetros; sin embargo, admitió que perdieron comunicación con autobuses que saldrían ayer de la misma zona, lo que podría estar relacionado con el ataque.

Pero ésta no es la única zona en riesgo, pues también bombardearon Donetsk, donde murieron más de 20 personas, según el reporte del ayuntamiento, mientras que en Irpin, cerca de Kiev, descubrieron los cuerpos de cinco civiles, casos que denuncian como crímenes de guerra, hecho por el que el asesor de Zelenski, Mijailo Podoliak, pidió catalogar a Rusia como organización terrorista actos atroces y dichos antisemitas.

Pese a esta situación, más líderes buscan negociar, pues hasta el papa Francisco se dijo dispuesto a reunirse con el mandatario ruso, Vladimir Putin, para buscar una solución a la guerra.

En tanto, Ucrania busca cortar paso a todo grupo que apoye al enemigo, por ello, firmó un decreto para prohibir la formación de organizaciones y partidos prorrusos, al recordar que estos movimientos separatistas sirvieron de apoyo para perpetrar esta guerra y ahora se eleva el riesgo con la advertencia de que, este mismo mes, la nación vecina se anexe hasta tres de sus territorios.

SIGUE AMAGO POR GAS

En el estira y afloja de los pagos, Putin reiteró que pondrá fin a las exportaciones de energéticos a Occidente.

A unos días de cortar la llave a Polonia y Bulgaria, el líder del Kremlin ordenó a su equipo enlistar a las naciones y dirigentes que los han sancionado, para responder con la prohibición de energéticos a éstos, agravando las amenazas contra socios de la Unión Europea (UE), bloque regional que acelera el debate para definir su postura en torno al plazo para dejar de depender de esa nación.

Y ante la falta de consenso en el tema y nuevas sanciones, el gobierno francés de Emmanuel Macron bloqueó propiedades valuadas en 700 millones de euros a un grupo de oligarcas rusos.

  • El dato: Horas antes de que comenzara la invasión en Ucrania, el presidente Vladimir Putin se reunió con oligarcas, lo que permitió que éstos sacaran su fortuna de la nación.