La legitimación del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) de los empleados de la planta de General Motors, en Silao, Guanajuato, inició ayer bajo señalamientos de los sindicatos independientes de falta de seguridad y la ausencia de inspectores.
No obstante, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) reportó que el primer día de votaciones se realizó sin impedimentos. Incluso, en un ejercicio de transparencia, habilitó un micrositio en su página web en el que se podía seguir minuto a minuto el proceso encabezado por el sindicato “Miguel Trujillo López” de la Confederación de Trabajadores de México (CTM).
Más temprano, en conferencia de prensa la Federación de Sindicatos Independientes de las Industrias Automotriz, Autopartes, Aeroespacial y del Neumático (FESIIAAAN) denunció la falta de condiciones de seguridad en la legitimación de contrato colectivo al no detectar inspectores ni elementos de protección.
Juan Pablo Hernández Lara, coordinador de FESIIAAAN, mencionó que continuaron acciones de intimidación a los trabajadores con el fin de que sí aprueben el contrato.
“La empresa y el sindicato están asustando a la gente de que se van a quedar sin empleo, que la empresa se va a ir, que el contrato va a desaparecer. Obviamente le están apostando al miedo, que es como han logrado permanecer en el poder, pero los trabajadores hoy van a dar la sorpresa y va a ganar el no, porque el contrato de protección patronal anterior fue impuesto”, declaró.
Además, señaló que el paro técnico al que entró la armadora la semana pasada influyó para que se impidiera la debida promoción al ejercicio de votación. Integrantes de la organización sindical de la armadora, Generando Movimiento, advirtieron que por temas de horarios 100 empleados de mantenimiento no podrán ejercer su derecho al sufragio.
Es la primera vez que se realiza un proceso similar en el país y que marcará la nueva gobernanza laboral en México; no obstante, de suscitarse algún inconveniente marcaría un nuevo altercado con Estados Unidos bajo el T-MEC, coincidieron analistas.
Según Alejandro Avilés, presidente del Colegio de Abogados Laboralistas de la Ciudad de México, en caso de ser legitimado el CCT el sindicato mayoritario seguirá con la titularidad del mismo, pero de lo contrario los trabajadores podrán emplazar a huelga para convenir un nuevo contrato, que tendrá que ser celebrado con la representación laboral más grande.
“Si deciden no legitimar, se procederá a su cancelación, pero se deberán respetar las condiciones laborales contenidas en el mismo, esto incluye derechos y obligaciones. Los trabajadores pueden presentar ante el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral las inconformidades que adviertan en el proceso y que vulnere los principios de seguridad, transparencia y confiabilidad”, dijo a La Razón.
En este sentido, José Ignacio Martínez Cortés, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN), comentó que el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del T-MEC termina cuando se repone el daño, que fue la mala gestión del evento en abril pasado; no obstante, Héctor de la Cueva, coordinador del Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical, expuso que EU todavía tiene que evaluar si el proceso de remediación que implementó México es satisfactorio.
Con ello, el vecino del norte podría convocar un Panel de Solución de Controversias, lo cual no sería conveniente para el país. “Está en juego la nueva gobernanza laboral de México. Lo que estamos viendo en estas horas es algo que no pasaba, el libre sindicalismo. Este proceso debe salir con mucha pulcritud por parte de la STPS para que el actual Gobierno logre posicionar el nuevo esquema laboral del país y se atienda el reclamo de EU”, dijo Martínez Cortés.
- El dato: Estados Unidos destinó 130 millones de dólares a México para que pueda avanzar más rápidamente en la reforma laboral que se promulgó en 2019.