Inseguridad en la entidad

Morelos: despiden a niño que murió por bala perdida

Durante el cortejo fúnebre, familiares, amigos y habitantes de la localidad portaron globos de color blanco y cartulinas en las que exigían justicia

Pobladores de Yautepec se sumaron al cortejo fúnebre y exigieron justicia por la muerte del pequeño, ayer.
Pobladores de Yautepec se sumaron al cortejo fúnebre y exigieron justicia por la muerte del pequeño, ayer. Foto: Cuartoscuro

Ayer, pobladores del municipio de Yautepec, Morelos, dieron el último adiós al pequeño de 11 años de edad que perdió la vida debido a que fue alcanzado por una bala perdida durante un tiroteo registrado el pasado lunes.

Durante el cortejo fúnebre, familiares, amigos y habitantes de la localidad portaron globos de color blanco y cartulinas en las que exigían justicia y un castigo severo para los responsables de la muerte del pequeño estudiante de sexto grado de primaria.

“No queremos más partidos políticos. Ya basta de besos y abrazos a los delincuentes. Hoy fue mi hijo de 11 años, mañana pueden ser ustedes. Queremos justicia”, decía una cartulina que portaba el padre del niño.

El pasado lunes, momentos antes de que ocurriera la balacera que le costó la vida, la víctima había ganado un concurso de dibujo sobre la importancia de preservar la paz.

Tras salir de la escuela Miguel Hidalgo, el menor y su madre acudieron a comprar tortillas y de pronto se escucharon disparos. En cuestión de segundos, la mujer se dio cuenta de que su hijo ya tenía un impacto de bala, por lo que pidió apoyo, pero todo era confusión y la gente corría para ponerse a salvo.

Familiares de la víctima aseguraron, en declaraciones a medios de comunicación locales, que al lugar llegaron paramédicos, pero se negaron a trasladar al niño, con el argumento de que ya no había nada que hacer.

En la balacera en la que quedaron atrapados el pequeño y su madre perdió la vida un hombre de 36 años de edad, quien aparentemente era el objetivo de un grupo de hombres armados.

Durante la caravana que acompañó al féretro de la víctima por calles de la cabecera municipal de Yautepec, su padre, Arturo Morales, exigió, con lágrimas en los ojos, que el crimen no quede impune, pues, dijo, un ser inocente perdió la vida en un evento violento al cual era completamente ajeno.