a

Publica El alma de las cosas

Gabriela Peyron revela gestos y acciones de los objetos que nos rodean

Cuaderno ilustrado por la artista española Raquel Labrador; se compone de 17 relatos desbordados de fantasías, donde enseres cotidianos revelan vida propia

Gabriela Peyron (Ciudad de México, 1955).Foto: Especial
Por:

Gabriela Peyron (Ciudad de México, 1955), ganadora del Premio Nacional de Cuento infantil Juan de la Cabada 2000 por el elogiado cuaderno Melancólicos lanzamientos de pelota, además, autora de una veintena de volúmenes de literatura para niños, lanza El alma de las cosas (Colección A la orilla del Viento, FCE, 2022) conformado por 17 relatos breves en los cuales, los objetos que nos rodean revelan su ánima. Libro de pespuntes imbuidos en un sugerente imaginario escoltado con ilustraciones de la artista plástica española Raquel Labrador.

Historias que relatan a una aldaba colocada en una puerta de roble, la cual estimula la curiosidad de un infante; unos libros confiesan el deseo de ser leídos; una gran jaula arropa a niños-pájaros, el espejo con poderes mágicos hace volver al ser más estimado del dueño de un castillo; la manzana vanidosa convertida en la fatalidad de una doncella; o la luna que flota en el mar del cielo: bajo su manto protege a los sonámbulos y socorre a los que tienen pesadillas...: vaya desborde de ensoñaciones, las cosas que habitan este mundo dialogan con nosotros.

“En estos cuentos las cosas en su silencio aparente se hacen cómplices de nuestros actos. Como dice Octavio Paz sobre los objetos: ‘Viven a nuestro lado, / los ignoramos, nos ignoran. /Alguna vez conversan con nosotros’. Estoy convencida que las cosas poseen una voluntad propia, única, por eso coleccionamos enseres que llegamos a querer como algo entrañable. Hay un misterio en todo eso. He querido revelar a los lectores juveniles ese enigma, mediante breves historias que estimulen su curiosidad e invención”, comentó en entrevista con La Razón, Gabriela Peyron, también acreedora del Premio FILIJ de Cuento Infantil 2000.

¿Por eso suscribe usted la cita de Cien años de soledad del pregón de los gitanos en Macondo? Refiero aquello de “Las cosas tienen vida propia –pregonaba el gitano con áspero acento–, todo es cuestión de despertarles el ánima”. Me pareció muy certero como preámbulo del libro.

“Aldaba”, colocado al inicio del libro: ¿alegoría: un ‘cuento-puerta’? Da inicio al cuaderno, hay algo de eso: gracias a que el niño toca la puerta con la argolla que nadie le hace caso es que ésta se abre. La mujer elogia al muchacho y le dice que es una ‘aldaba’. El objeto al escuchar su nombre vuelve a ser, se da cuenta de su importancia, hoy olvidada por el uso de un timbre. Sí, esa historia es el portón del libro.

Ilustraciones que conforman un discurso visual complementario. ¿Cómo fue el trabajo con la artista española? Fueron los editores quienes la seleccionaron. Yo, tan pronto vi la ilustración del cuento “La jaula”, quedé encantada. Ella no realiza figuraciones de los relatos, sino que configura un cosmos visual que dialoga con la trama de los textos. Los lectores son testigos de dos propuestas: la verbal y la iconográfica.

¿Imagenerías que también sorprenden a lectores adultos? Así lo concibo. No hay como tal una ‘literatura para niños’: existe la literatura. Alicia en el país de las maravillas: ¿hasta qué punto es sólo para el disfrute infantil? O, asimismo, la obra de los Hermanos Grimm o de Perrault.

Cierra el volumen con el relato “Sueños”: ¿no es precisamente un objeto? Quizás sea el texto más ‘filosófico’ del volumen. Está precedido por la célebre cita de S.T. Coleridge sobre la rosa que recibe un hombre que atraviesa el Paraiso mientras sueña y al despertar encuentra la rosa en su mano. Cuando soñamos están presentes todos los mundos, todas las cosas, todos los espejos, todos los tiempos, todas las acciones, todos los laberintos.

El alma de las cosas
El alma de las cosas
  • · Autor: Gabriela Peyron
  • · Género: Cuento
  • · Editorial: FCE, 2022