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Publica La fiesta prometida

Jennifer Clement rememora años rebeldes de Nueva York y CDMX

“Escribí este libro con el propósito de retratar una época clave de mi generación: los años 70”, afirma a La Razón; hay referencias de Cortázar, Frida Kahlo, Burroughs, Basquiat...

La autora, en una imagen promocional.Foto: Cortesía Editorial Lumen
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Jennifer Clement (Greenwich, 1960) —autora de la novela Lady-di (2014), columna argumental de la premiada cinta Noche de fuego, dirigida por Tatiana Huezo— presenta La fiesta prometida (Lumen, 2024): viaje de la memoria en que se develan complicidades entre amigos, lealtades, actos rebeldes y experiencias capitales entre dos metrópolis, Ciudad de México y Nueva York, en frunces que marcaron infancia y juventud, respectivamente. Descubrir lo cotidiano en todas las franjas de sus desafíos: los esplendores de la noche y el diálogo con espectros de artistas y escritores determinantes en la formación espiritual de una escritora.

El lector tiene frente a sus ojos un mapa refulgente de incidentes develados en una prosa cercada por la poesía en vínculos con los centelleos de unos años capitales untados por los soplos de una vida singular, única y trascendente. Retrato de una realidad desnuda que estalla en cada instante por la magia de sus frisos, por la búsqueda persistente de la autonomía. Lo inesperado como estímulo; y los acasos como amuletos que asientan sediciones. “Un libro bello e informativo que ofrece a los lectores una atractiva panorámica de la vida de una verdadera artista”, suscribe el boletín de Estilo de Vida Dua Lipa, Service 95.

“Este libro surge por la necesidad de echar un vistazo al pasado, tiene que ver con el transcurrir; pero, más que todo porque he vivido dos tiempos trascendentes, vitales: mi infancia en la Ciudad de México y la juventud acelerada en Nueva York. Mi memoria y los sostenes de mi imaginario están configurados por esas dos ciudades, son dos espacios que se entretejen en mis evocaciones. Escribí este libro con el propósito de retratar una época clave de mi generación: los años 70”, dijo a La Razón Jennifer Clement, presidenta emérita del PEN Club Internacional de escritores.

¿La persigue a usted el estigma del libro La viuda de Basquiat? Sí, los editores anuncian este libro como la “precuela La viuda de Basquiat”; sin embargo, es más que eso. Dos capítulos: “La viuda de Basquiat” y “Jean-Michel Basquiat 1960-1988” generan un diálogo entre ambos libros. En el inicio cuento cómo conocí a Suzanne y su relación con Jean-Michel.

¿Memorias que hurgan en las raíces de la identidad? Escarbar en el pasado deriva en muchas cosas. Sí, hay una exploración en mis orígenes y en mi identidad. Realmente, el inglés se convirtió en mi lengua por una cuestión escolar; pero, mi decisión ha sido por México, me atrevo a decir que este libro es una muestra del amor incondicional que le tengo a este país.

La nostalgia está latente en todo el libro: me importaba explorar saber quién fui y revisar todos los episodios que me marcaron en la juventud

Jennifer Clement, Escritora

¿Qué papel jugó Chona, su nana, en su formación? Ella no sabía leer ni escribir. Aprendí a leer y a escribir por ella. Le gustaban las fotonovelas y con ellas perfeccioné mi lectura: le leía a Chona los episodios, hay diálogos que todavía recuerdo. Sin embargo, fue mi padre el que me marcó: era amante de la literatura, nos leía sonetos de Shakespeare. Mi padre me enseñó una condición para vivir en el que la literatura y la vida son contiguas.

¿Ladydi o Amor armado se contraponen a La fiesta prometida? Dos novelas de tramas aciagas, duras. Pero, en este libro no todo es esplendoroso: también abordo la miseria, la pobreza y la violencia. En el censo de 1970, que integra un capítulo, doy cuenta del cuestionario para el pueblo donde se evidencia, por ejemplo, que mucha gente no comía carne y los niños se morían; las niñas de 12 años se embarazaban y muchas veces los bebés morían en el parto.

¿Jean-Michel Basquiat, Madonna, Diego Rivera...? Figuras con quienes tuve contacto por azares: la mujer de Basquiat era mesera como yo en el mismo restaurante, por eso lo conocí; lo mismo sucedió con Madonna, que trabajaba en un bar que frecuentábamos; en México, la nieta del pintor Diego Rivera era mi mejor amiga. La vida mía está marcada por eventualidades.

¿Un libro nostálgico y gozoso? La nostalgia está latente en todo el libro: me importaba explorar saber quién fui y revisar todos los episodios que me marcaron en la juventud. Lo escribí con desbordado deleite en la búsqueda de dar testimonio del fulgor de una época, de sus esplendores, de su magia.

¿Por qué el uso de una estructura fragmentaria? Así irrumpe la memoria, en pedazos. Regresamos al pasado y sólo vemos guijos, recortes, limaduras, nunca divisamos una totalidad.

¿La vida como una ‘fiesta prometida’? Siempre lo es. La celebración como centro de lecturas, músicas, personajes imborrables, bailes, la noche, delirios y sueños.

La fiesta prometida
La fiesta prometida
  • Autora: Jennifer Clement
  • Género: Memorias / Editorial: Lumen, 2024
Presentación del libro
  • Cuándo: 3 de septiembre
  • Dónde: Librería El Péndulo (Álvaro Obregón 86, Roma Norte, CDMX)
  • Horario: 19:00 horas