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Hasta el 9 de noviembre

Muestra dialoga con la literatura de Vargas Llosa

Inspirada en El elogio de la madrastra, de Mario Vargas Llosa, la exposición “Regocijo”: Un camino de placer y reflexión, de Miguel Casco, se presenta en el ArtSpace de Ciudad de México

Una de las obras de la serie El desayuno, de Miguel Casco.Foto: Especial
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Inspirada en El elogio de la madrastra, de Mario Vargas Llosa, la exposición “Regocijo”: Un camino de placer y reflexión, de Miguel Casco, se presenta en el ArtSpace de Ciudad de México, en Campeche 281, Hipódromo, Condesa. A través de la exploración de la corporalidad y el ilusionismo pictórico, el trabajo del artista desafía las normas en torno a la desnudez, la coexistencia y la censura para hacer “una búsqueda o una investigación a partir de encontrar el cuerpo humano como este medio para, tanto sufrir, como para gozar”, en palabras del autor.

La muestra se remonta al 2018, cuando nació El desayuno, pinturas que conforman “Regocijo”. El artista invitó a algunas personas a desayunar con la condición de que lo hicieran desnudas. El registro de video y las piezas pictóricas, que se apreciarán en el ArtSpace hasta el 9 de noviembre, son un diagrama de la ruta que va de la desnudez a la convivencia y al placer.

La exhibición es particular, es la primera vez que se presenta de forma individual y con una exploración multidisciplinaria que ha contado con la ayuda de la curadora, Kuratrix. “Muestra no sólo pinturas, sino también performance, instalación, video. Y en esta ocasión, por la curadora, Kuratrix, es que se une la literatura. Va a ser una revisión a partir de la literatura, utilizando la obra de Vargas Llosa para revisitar el proyecto de El desayuno con este título ‘Regocijo’” compartió Miguel Casco a La Razón.

Tal como las pinturas sensuales que coleccionaba Don Rigoberto, protagonista de El elogio de la madrastra, mismas que evocan la exploración de la sexualidad sin tabúes en la novela de Vargas Llosa, el artista Miguel Casco presenta 14 piezas inéditas en las que muestra la desnudez humana como la representación de la dualidad entre lo sagrado y lo mundano, mediante una narrativa visual rica y evocadora.

“En algunos espacios sí ha habido barreras de identificar la desnudez como un tabú, no están normalizados a los cuerpos desnudos”, dijo el artista sobre los desafíos al exponer.

“Regocijo”
  • Cuándo: hasta el 9 de noviembre
  • Dónde: ArtSpace (Campeche 281, Hipódromo, Condesa)
  • Acceso: gratuito