Snafu trae su irreverente show de títeres al Cervantino

La titiritera Ingrid Hansen, quien da vida al icónico monstruo naranja en Helpsters, serie ganadora de un premio Emmy, considera que las marionetas son agentes de caos en las que ella llega a poner orden, conjugando la tradición con la modernidad, tal como lo hace en El show del bebé Tyler, en el que solamente con su mano y una cabeza de plástico, da vida a un divertido niño que lleva a los espectadores a un mundo de magia e inocencia.

“Las marionetas son agentes de caos, yo soy la maestra de las marionetas y quien puede gestionar ese caos. Es muy divertido”, dijo en entrevista vía Zoom con La Razón y adelantó que en El show del bebé Tyler, que se presentará en el Festival Internacional Cervantino el 19 y 20 de octubre, “baby Tyler va a hablar español. Regularmente hago los shows muy universales, va a haber ositos de gomita en el espectáculo”.

La artista presentará este espectáculo con la compañía canadiense Snafu, fundada por ella y Victor Dolhai y Sarah Jane Pelzer, quienes junto con ella están inquietos por saber cómo reaccionará el público que acuda a Guanajuato.

“Me emociona mucho y me causa curiosidad ver cómo reacciona el público por este lado del mundo, qué tan diferente. A veces las audiencias en Canadá (su país natal) llegan a ser muy corteses, muy educadas”, expresó Ingrid Hansen, quien ve en los títeres un “arte de fácil acceso y universal”.

La titiritera destacó que el arte de los títeres tiene mucho de magia y fantasía, porque es “tomar algo que no está vivo y darle vida, una personalidad”, como lo hace con el bebé Tyler, quien en el espectáculo vive toda una serie de situaciones cotidianas que pueden llevar a la risa a los espectadores, e incluso, a sentimientos como la ternura, como cuando el personaje se mete con timidez a una tina de baño.

Para generar todas estas situaciones hay un enorme trabajo detrás, principalmente de práctica que le ha dado la habilidad para que su mano se convierta en el cuerpo de ese travieso bebé.

“Llega a ser muy complicado y simple al mismo tiempo, he notado que cuando la gente está sentada viendo a baby Tyler entrar o moverse, de repente el público trata de hacer lo mismo con las manos, trata de imitar los movimientos para ver si son capaces de hacerlo y es divertido.

“Es práctica y tiempo de prueba también, hay muchas escenas, muchos movimientos que al final no logran ver en el show en el que creamos todo este ridículo caos; tenemos que probar qué funciona y qué no”, compartió.

Ingrid Hansen señaló que si algo ha aprendido de trabajar con marionetas es que “hay que ser muy humilde, porque “cuando intentas plasmar la idea que ya tenías en la mente termina siendo otra cosa. No puedes apegarte siempre a las ideas iniciales que tenías. Empiezas a refinar, hasta hacer personajes o movimientos muy específicos, coreografías muy específicas”, apuntó.

Agregó que oto aspecto importante es observar al público, porque es el que marca la pauta de lo que divierte.

El show del bebé Tyler se podrá ver en el Teatro Principal de la ciudad de Guanajuato, los próximos 19 y 20 de octubre, a las 18:00 horas.