Todos los incendios: coming of age sobre quemar las emociones

Para muchas personas a veces es difícil encontrar la mejor manera de expresar cómo se sienten y justo este es el caso de Bruno, un adolescente pirómano que pasa por un luto que le hace escapar de su casa cuando su madre formaliza una nueva relación amorosa. Ignorando a su mejor amigo y sumergido tanto en la frustración como en el enojo y la tristeza, el chico viaja para estar con una joven, en lo que también es un intento de él para reafirmar su masculinidad.

Mauricio Calderón Rico, director de Todos los incendios, platicó en entrevista con La Razón sobre diversos aspectos de su película y de cómo se siente por presentarla en México tras haberla llevado a festivales internacionales de cine como el de Locarno.

“Esta película realmente no es autobiográfica, pero sí nace de juntar varias cosas que nos pasaron tanto a mí como a un amigo, entonces como que es un mix de anécdotas y realmente nació como una tesis de una maestría que hice en guion, ahí tuve oportunidad de desarrollar el proyecto y luego cuando terminé mi maestría lo guardé en un cajón y ahí se quedó un par de años, lo desempolvé para un concurso y ganamos el primer lugar, entonces pensé que podía ser una buena película”, expresó el realizador acerca del génesis de su cinta.

“Podría decirse que el proyecto nació como tal en 2019 cuando decidimos ya hacerla, porque la gestación fue años atrás, teníamos proyectado filmarla en el 2021, pero vino la pandemia en el 2020 y los fondos se retrasaron, fue un poco complicado todo ese proceso y realmente estas cuestiones nos atrasaron un año porque terminamos filmando en 2022”, contó el cineasta sobre el recorrido un tanto complicado para poder llegar a la conclusión de su primer largometraje.

La faceta pirómana del protagonista es tomada como hilo conductor de la historia y sobre esto el director dijo: “El fuego siempre fue uno de los primeros elementos en el proyecto, porque siempre me ha atraído muchísimo cómo luce, tuve una especie de relación especial con el fuego porque una vez un bully me trató de incendiar el pants del uniforme y de ahí agarré un poquito de respeto al fuego; digamos que esta historia la escribí desde el miedo y le di la vuelta. También creo que Bruno tiene al fuego como esta válvula de escape para dejar salir todos sus impulsos, como la atracción que siente hacia su mejor amigo”.

Otro aspecto importante del protagonista que destaca en el filme es su despertar sexual, algo que para el director resultaba más personal. “Me tocó crecer un poco así como Bruno, él hace el viaje no sólo por tener esta conexión con una chica, sino para reafirmar cierta masculinidad que al final es falsa, yo lo quise reflejar un poco como yo lo viví porque siento que los jóvenes de ahorita ya lo viven un poquito más libre y sin etiquetas”, comentó Mauricio Calderón Rico.

Todos los incendios se presenta en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) como parte de su sección de Largometraje Mexicano.