Huracán Otis
Negocios reabren en Acapulco a paso lento
Al menos un hotel, un restaurante, un banco y 3 líneas del Acabús operan con limitaciones; avanza suministro de agua; persiste la basura acumulada
A pesar de que las cadenas de suministro de productos no se han normalizado, la reactivación de Acapulco avanza, aunque lentamente. Poco a poco, los establecimientos comienzan a reabrir y brindar servicios, además de que los víveres llegan en mayor medida y el Acabús también se reactivó.
Al menos un hotel en la Costera Miguel Alemán reabrió sus puertas, aunque con limitaciones, por 600 pesos la noche, lo mismo que un restaurante de comida económica que da servicio a precios más accesibles, para que la gente pueda consumir y ellos comiencen a tener ganancias.
Asimismo, una sucursal bancaria reinició sus operaciones en el centro del puerto, por lo que habitantes del puerto se volcaron a retirar dinero o realizar pagos de servicios atrasados, a pesar de que tenían que esperar hasta cinco horas para ser atendidos, bajo un intenso calor.
Una empresa refresquera también abrió sus puertas y regaló sus productos. En este tenor, personal de una taquería de la CDMX llegó con su puesto y regaló 120 kilos de tacos al pastor. También se prevé que cuatro de las cinco tiendas Chedraui retomen actividades a partir del lunes.
Adicionalmente, el restablecimiento del suministro de agua comenzó este jueves y lleva un avance de 45 por ciento. No obstante, persisten las montañas de basura en cada calle, a lo que se suma infraestructura derribada, postes de luz recargados en las casas y árboles tirados en las avenidas, debido a que el servicio de limpia no se ha normalizado y faltan toneladas de escombros qué recoger.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, resaltó que el servicio de transporte público Acabús comenzó a operar de manera gratuita en las rutas 1 Garita, Retorno, 3 Coloso y 5 Farallón.
A esto se suma que algunos camiones públicos comenzaron a realizar viajes en la zona de la Costera, lo que también contrarresta los altos costos de algunos taxistas, que llegaron a cobrar hasta nueve mil pesos por viajes a Chilpancingo.
El Gobierno federal prevé concretar avances en la reconstrucción del puerto para diciembre, y por lo pronto las actividades comerciales y de movilidad comenzaron a restablecerse para beneficiar a la población, aunque muchos habitantes siguen sin insumos para superar la emergencia.