Gazprom cierra la llave del gas a Alemania y UE bloquea a turistas rusos

La operadora rusa Gazprom cortó nuevamente el suministro de gas a Alemania, encendiendo las alertas en Europa sobre el servicio para el invierno; mientras la Unión Europea (UE) elevó medidas contra Moscú, por la guerra en Ucrania.

Como se anticipaba, suspendió el recurso a través del gasoducto Nord Stream 1, que se prolongará cuatro días, debido a un “mantenimiento” por segunda vez.

La primera suspensión fue a inicios de julio cuando la empresa reparó una turbina, que acusa fue retenida por Occidente, y casi dos meses después dijo que la única pieza en servicio necesita ajustes.

Sin embargo, para sus socios se trata de otra estrategia para controlar el precio de los energéticos, pues el gobierno alemán tildó la acción de represalia, pues ese suministro representa casi la tercera parte de lo que adquiere. Aunque Gazprom sostiene que después del mantenimiento retomará el nivel previo.

Así presiona a la UE, mientras Alemania y más naciones buscan opciones energéticas por si el régimen de Vladimir Putin pone fin definitivamente a las exportaciones, como ya lo hizo con otros o siga rebajando envíos; pese a las críticas, Moscú insistió que el gasoducto requiere una revisión y recordó a aliados de Ucrania que las sanciones económicas bloquearon el gasoducto Nord Stream 2.

A la par de estos hechos se reportó que anticipan bajar el flujo de gas a Francia, que afianzó a un proveedor africano ante el temor de perder el suministro ruso.

Pese a la incertidumbre, la UE resaltó que en las últimas semanas, en medio de los amagos del régimen, alcanzó la meta de 80 por ciento de recurso almacenado, según datos de Gas Infraestructure.

Esto da ciertas garantías para el invierno, pero reconocen que aún es posible que ocurra un cierre total por lo que insisten en elevarlo casi al tope a inicios del próximo año.

Pero no todos los gobiernos van por la misma ruta, pues mientras unos apuestan por una independencia, Hungría reforzó lazos con el gigante ruso. Ayer acordó casi el doble de envíos de gas natural, al pasar de 2.8 millones de metros cúbicos diarios a 5.8, evidenciando su rezago, pues es uno de los países que aún no logra la meta en lo individual con apenas 63 por ciento de gas almacenado.

En tanto, la UE definió nuevas restricciones al Kremlin y va por cortar lazos con un mayor número de rusos. Los ministros de Exteriores del bloque acordaron suspender nuevos visados a esos ciudadanos, al extender la medida que es aplicada actualmente a funcionarios y oligarcas, presuntos cómplices de Putin.

Aunque admiten que no es una prohibición total, anticipan severas limitantes para turistas que deseen viajar a la región que apoya a Ucrania, luego de las críticas del líder de Política Exterior del bloque, Joseph Borrell, contra visitantes que van de compras como si su país no estuviera librando una guerra. Para el diplomático las medidas podrían ser más severas, pero eso dependerá de cada nación.

Al respecto, el líder Volodimir Zelenski reiteró su llamado a ser más firmes contra Putin, pues pidió restringir los medios rusos, mismos que ya se han visto afectados en territorios europeos y en redes sociales, mientras una misión de la Agencia Internacional de Energía Atómica busca inspeccionar la central de Zaporiyia, entre los primeros bloqueos, pues se reportó que soldados rusos les impidieron el paso a través de territorios ocupados.

Pegan a Putin por Gorbachov

 Mientras el Kremlin resaltó la herencia del líder soviético Mijaíl Gorbachov a nivel mundial, líderes europeos aprovecharon su reconocimiento al estadista para cuestionar al actual presidente ruso, Vladimir Putin.

Aunque el mandatario destacó a quien provocó el colapso de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) como uno de los artífices de la evolución del mundo, su gobierno ha descartado, de momento, un funeral de Estado para él, pues la familia reveló que será sepultado este fin de semana junto a su esposa Raisa. Agencias rusas dijeron que será velado como otros soviéticos en la Casa de la Unión, pero descansará en el Convento Novodevichy, revelando las diferencias que había con el actual gobierno.

En ese tema abundaron líderes europeos, quienes cuestionaron como Putin puede recordar el legado de Gorbachov, pero ir en contra de éste. El alto diplomático regional, Joseph Borrell, señaló que con sus acciones, como la guerra contra Ucrania, prácticamente borró lo hecho por el último líder soviético.

Puntualizó que Gorbachov fue un “viento de libertad y trató de cambiar el sistema comunista”, pero el actual líder del Kremlin echó todo por la borda.

Su postura fue secundada por el canciller alemán, Olaf Scholz, quien precisó que a diferencia de la reunificación que logró Mijaíl, Vladimir “ha cavado nuevas zanjas en Europa”.

Previamente, el Kremlin dejó entrever el distanciamiento entre los líderes, pues señaló que el de Gorbachov fue uno de los periodos más difíciles por los planes que derivaron en el fin de la URSS; hecho que replicaron medios rusos al recordarlo como quien perdió el liderazgo geopolítico ante Occidente al conducir a una catástrofe en la materia, pues se caracterizó por una mala estrategia.