Ortega arrasa en su nueva farsa electoral

El régimen nicaragüense se alzó con el triunfo de los 153 municipios en disputa, al recuperar las pocas regiones que seguían bajo control opositor, en un proceso altamente cuestionado.

Un día después de las polémicas elecciones locales, el Consejo Supremo Electoral (CSE), controlado por el presidente Daniel Ortega, confirmó la victoria de la alianza Nicaragua Triunfa, encabezada por el Frente Sandinista, hecho que no sorprendió a sus críticos, pues ya esperaban un resultado similar al del año pasado.

Según el órgano electoral, los sandinistas ganaron 135 regiones en solitario, pero su poder aumenta al contar a aliados con 18 más, luego de apropiarse de regiones que votaron por Ciudadanos por la Libertad, fuerza a la que arrebató su personería jurídica por supuestamente recibir financiamiento extranjero.

Sin embargo, a diferencia del año pasado cuando Ortega amplió su mandato, tras contener a los disidentes mediante la represión policial, esta vez no hubo un balance de la participación electoral.

La presidenta del CSE, Brenda Rocha, calificó la jornada como un ejercicio civil exitoso, pero evitó adelantar los niveles de apoyo, presumiblemente ante la evidencia de que muchos centros lucieron vacíos, pese a que acarrearon ciudadanos.

Pero la organización Urnas Abiertas detalló que sólo 17.3 por ciento de la población acudió a la farsa, al ser presionada y trasladada por la fuerza a los centros. Además, destacó que el total es inferior al del año pasado, pues en ese momento se registró una abstención de 81.5 por ciento, según la oposición.

Al respecto, el Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, admitió nuevamente preocupación por la repetición de actos de asedio contra los críticos, pues registró al menos ocho detenciones arbitrarias, menos de la mitad de que las que contabilizó Urnas Abiertas durante la última semana.