Se contrae producción y exportación de vehículos
Impacto, por el paro de plantas de producción por falta de chips; advierten que Ómicron puede ser un factor de riesgo para el sector
La producción y exportación de vehículos ligeros registraron una contracción de 16.5 y 17.3 por ciento, respectivamente durante diciembre del año pasado, el mayor retroceso para un mismo mes desde 2006, señalaron cifras del Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros.
De acuerdo con el reporte dado a conocer por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en diciembre del año pasado, la fabricación de vehículos alcanzó las 212 mil 272 unidades, 1.14 por ciento por debajo de los niveles observados antes de la pandemia.
En el acumulado de los 12 meses del año pasado, el ensamble de estas unidades se ubicó en 2 millones 979 mil 276, 2.0 por ciento menos que lo registrado un año antes con 3 millones 040 mil 178 vehículos.
Un análisis de Banco Base señala que, en diciembre de 2021 se presentaron afectaciones en la producción en las plantas automotrices de Audi, en San José Chiapa, Puebla y de Mazda en Salamanca, Guanajuato.
En tanto, las exportaciones automotrices se ubicaron en 227 mil 465 unidades contra las 275 mil 081 unidades colocadas en el extranjero.
Con respecto a su nivel prepandemia (diciembre 2019), las exportaciones muestran todavía un rezago de 3.96 por ciento.
En el acumulado de los 12 meses del 2021, las exportaciones automotrices se ubicaron en 2 millones 706 mil 980 unidades, exceptuando el 2020 éste es el menor nivel desde 2014, presentando un crecimiento de 0.94 por ciento respecto a 2020.
En este sentido, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, refirió que el dinamismo que se podría haber observado en diciembre se vio ralentizado por las condiciones adversas del mercado, las cuales están relacionadas con la escasez de chips y el debilitamiento de la demanda interna.
“Hacia adelante la propagación de la variante Ómicron u otras variantes puede representar un riesgo para el sector automotriz, puesto que podría verse reflejado en un mayor deterioro en las cadenas de valor globales afectando a la producción y, por ende, a las ventas y exportaciones automotrices. Aunado a esto, la ausencia de recuperación en el empleo y la inflación en el país continuarán limitando la demanda interna”, sostuvo.