Gastrónoma de emergencia

No es un secreto que la epidemia de Covid-19 pegó más duro en algunos municipios que en otros.

Y por su población, de dos millones de personas, Iztapalapa fue uno de los más golpeados y donde para detener la propagación hubo que intensificar campañas, y es que la alcaldía ha estado entre los primeros lugares en número de contagios y decesos.

Bueno, hay que recordar las devastadoras fotografías de un panteón en dicha demarcación en las que se hacía un comparativo de cómo estaban vacíos a mediados de mayo y tres meses después, ya con los estragos de la epidemia, éstos estaban repletos.

Es por ello que algo me ha llamado la atención. Y es que no cuadra la estrategia institucional y el personal encargado de llevarla a cabo. Hasta el castillo me han llegado denuncias de personal médico de dicha alcaldía señalando que la Jefatura de Unidad Departamental de Emergencias está encabezada por… una licenciada en Gastronomía.

¿Qué? Sí, en la alcaldía donde la epidemia ha pegado más fuerte una licenciada en gastronomía, de nombre Karla Lyly Sánchez Buenrostro, es la encargada de coordinar un programa de acción institucional para la atención prehospitalaria y quien presume en su currículum tener experiencia en “redacción de informes y análisis”, así como en captura de bases de datos.

Las denuncias del personal por el mal manejo del área van desde las malas condiciones en las que tienen que operar las ambulancias de la demarcación —que si mal no recuerdo fueron adquiridas hace un par de años— hasta el robo de combustible de estas unidades.

Además, el reúso de los trajes que se pone el personal médico para el traslado de personas con Covid-19, pasando por el deterioro de las cápsulas de bioseguridad que se adquirieron por parte de la alcaldía para enfrentar la emergencia sanitaria.

Hasta el corte de este fin de semana, en Iztapalapa sumaban ya casi dos mil defunciones por Covid-19 y casi 20 mil contagios acumulados.

La alcaldesa Clara Brugada ha pedido en varias ocasiones no bajar la guardia, pero la mala administración en las áreas críticas de la demarcación podría ser una piedra en el zapato y empeorar la situación.

En el baúl: Hasta mis oídos ha llegado el rumor de un equipo en la Policía de Investigación encargado de buscar y detener feminicidas. Gracias a la labor de estos agentes es que por estos días fueron detenidos una mujer y un hombre, madre e hijo, por el asesinato de una joven de 18 años en la Ciudad de México.

Hace unos meses reportamos en este mismo espacio, el incremento en la detención de feminicidas durante la primera mitad del año en comparación a 2019. No sólo la epidemia y el confinamiento hizo que estos agresores cayeran, sino que también se debe al trabajo de ese equipo de policías. Hay cosas que deben reconocerse.