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Josefina Vázquez Mota

Urge atender salud mental en niñez

SIN MIEDO

Josefina Vázquez Mota 
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Por:

Javier era un joven excepcional, de corazón bueno, cuenta su madre, hasta que desafortunadamente decidió quitarse la vida, “no me di cuenta a tiempo”.

La triste realidad del suicidio es una acción permanente a un dolor temporal. Quien contempla el suicidio no es porque quiera morir, es porque no encuentra cómo vivir con su dolor y quiere escapar.

Recientemente, en el Senado avalamos por unanimidad, una reformar a la Ley General de Salud, para que en caso de que un menor sea diagnosticado con algún trastorno mental y requiera internamiento, se tomen las medidas necesarias a fin de proteger sus derechos y se evite alguna interpretación inexacta, error u omisión de las disposiciones legales, que pueda derivar la eliminación de algún derecho fundamental.

Era indispensable la armonización del artículo 77 de la Ley General de Salud, pues debido a la

pandemia de Covid-19, los problemas de salud mental de las y los menores se han agudizado.

Datos de UNICEF resaltan que más de dos millones de niños y adolescentes en México padecen un trastorno mental como consecuencia de la violencia familiar física o sexual; padres sin empleo o estresados, así como por la falta de convivencia ante la contingencia sanitaria.

Millones de niñas, niños y adolescentes en nuestro país padecen violencia en el hogar; castigo físico y humillante; acoso escolar, y abuso de sustancias por parte de alguno de sus padres.

En 2020, de acuerdo con el Inegi, más de mil 100 niñas, niños y adolescentes decidieron suicidarse en nuestro país, siendo una cifra nunca antes registrada. Del total de menores de edad que decidieron quitarse la vida, cerca de 300 niñas y niños tenían entre 10 y 14 años de edad.

La cifra de suicidios aumentó cerca del 40 por ciento, respecto al año 2019, por lo que es la tercera causa de muerte entre el grupo poblacional de 10 a 14 años.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho que la mitad de las enfermedades mentales comienzan antes de los 14 años, y que en la mayoría de los casos, ni siquiera son detectadas.

En el anexo 18 del proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022 (PEF), sobre recursos para niñas, niños y adolescentes, no se contemplan recursos para la atención mental de los menores, por ello hemos alertado a nuestros compañeros diputados para que se destine presupuesto a este rubro.

Dado que es indispensable acompañar la salud mental de niñas, niños y adolescentes, ya que ésta es fundamental para la salud física y emocional, pero también, para que tengan una vida de calidad, sean felices y puedan integrarse a la sociedad.

Como diría María Ángeles Espinosa, profesora de la Universidad Autónoma de Madrid: “No hay salud física sin salud mental, una niña, un niño con ansiedad y depresión tendrá problemas en la escuela, en su aprendizaje, en su integración social, y no atender convenientemente estos problemas está poniendo en riesgo y comprometiendo su futuro”.