El enfoque interdisciplinario no sólo amplía nuestra lectura de la realidad; literalmente crea horizontes nuevos, porque ofrece lugares para mirar las ideas bajo una nueva luz. Desde su juventud, el ensayista y editor italiano Roberto Calasso hablaba inglés, francés, alemán, griego, latín; luego añadió el sánscrito. La devoción por los mitos de Oriente y Occidente, así como la agudeza para analizar el presente valiéndose de las humanidades, alimentaron un genio irremplazable. A un año de su muerte, Francisco Goñi lo pondera.
La literatura absoluta de Roberto Calasso
Francisco Goñi