El pasado 13 de noviembre fue asesinado Jesús Ociel Baena Saucedo, magistrade del Tribunal Electoral de Aguascalientes. Su muerte causó gran conmoción, pues se trataba de la primera persona no binaria en asumir una magistratura judicial en América Latina. En ese contexto publicamos esta reseña de Pablo Rodríguez sobre el libro [nada de cruces], del mexicano Ángel Vargas, que retrata a una persona en tránsito hacia un sexo diferente al que le fue asignado al nacer. Entre las heridas y el deseo, lo poético alumbra la búsqueda por la identidad
Las fronteras de un cuerpo
Pablo Rodríguez