Antes de comenzar, recordemos que esta nueva BMW X7 fue presentada en el autoshow de Los Ángeles de 2018 y llegó a nuestro mercado el pasado mes de abril. Se comercializa en ocho versiones, que van desde $1,644,550 hasta $1,904,900.
Esta nueva SUV es el vehículo más grande de la familia BMV, mide 5.15 m de largo, dos metros de ancho y 1.8 metros de alto. Gracias a estos números puede llevar hasta siete pasajeros.
Respecto a su diseño tenemos que trae faros LED autoadaptables, con faros de niebla LED. La clásica parrilla de dos riñones de BMW está en acabado cromo, pero aquí su tamaño es realmente inmenso. Posee rines de 21”, contorno de ventanas en acabado negro brillante, escape doble con molduras en cromo, que siendo honestos, no me agradaron tanto.
Comencemos por la iluminación, la cual es única, pues ofrece seis tonos que puedes elegir. La verdad luce increíble, se aprecia en consola, puertas, bocinas y techo panorámico.
Luego en los materiales encontramos piel en los insertos de puertas y vestiduras de asientos, se ve y se siente super bien el tacto. Otros acabados son en madera, aluminio, plásticos en negro brillante como opacos en ciertas partes del interior. Algo peculiar es el vidrio exclusivo para el pomo de la palanca de velocidades; todos en general están muy bien terminados.
Referente al equipamiento trae muchas cosas: clima automático de cuatro zonas, head-up display, la llave (ésta es muy especial, pues muestra en una pantalla táctil el estado del vehículo como autonomía, bloqueo de puertas, etc.), sonido Harman Kardon de 16 bocinas, cámara de 360° con diferentes modos de visualización y tablero digital de 12.3”.
De lado del infoentretenimiento, la pantalla es de 12.3” y es táctil, incluye navegador más las funciones de BMW Connected además de enlazarse por medio de Apple Carplay. Ojo. No ofrece conectividad con Android Auto.
En cuanto a las plazas traseras, encontramos dos filas de asientos que pueden albergar a cuatro pasajeros (existe otra configuración para cinco). En la segunda fila vas muy cómodo, super holgado, con espacio de sobra para piernas como cabeza. Con respecto a la tercera hilera, tenemos primero que el acceso se hace al mover el asiento que es eléctrico y deja un espacio considerable para poder pasar, dicha acción no es tan complicada. Ya sentado en dicho espacio, las piernas van limitadas, no hay área para moverse mucho. Un adulto podría soportar un viaje corto, pero para uno de mayor tiempo, no tanto. Las amenidades que encontramos en esta área: salidas de aire, bocinas con extraordinario sonido y los controles del clima.
Finalmente, en cuanto a la cajuela, tenemos que el espacio es de 326 litros y puede aumentar hasta 2,120 l, plegando la segunda como tercera fila de asientos.
La variante que probamos de esta X7 emplea una máquina de seis cilindros twinturbo 3.0 l con 340 Hp y 332 Lb-pie de torque. La caja es automática de ocho velocidades, que transmite la energía a un sistema de tracción integral. Para protección de los ocupantes trae bolsas de aire frontales, laterales y de cabeza, ABS, control de estabilidad, asistente de estacionamiento, entre muchas otras cosas.
Trae suspensión adaptativa, la cual cuenta con amortiguadores controlados de manera electrónica y “resortes neumáticos” en ambos ejes. Esto permite adaptar la altura del vehículo de forma manual o automática para las condiciones de necesidades.
Ofrece varios modos de manejo: Confort, Ecopro y Sport, éste último es el que más nos gustó, pues aparte de divertido, permite que la entrega de potencia se haga desde muy abajo del cuenta revoluciones.
En temas de desempeño si por el enorme tamaño, además de su peso de más de dos toneladas y media, pensarías que es un vehículo lento, es todo lo contrario. Es una camioneta ágil, súper rápida, acelera increíble, tiene potencia de sobra para hacer lo que sea. En ningún momento sientes que estás en vehículo de grandes proporciones y masa.
Es un vehículo muy versátil, pues se disfruta al manejo por las excelentes prestaciones que tiene y se puede disfrutar en plazas traseras