Volvo tiene como meta reducir las emisiones de CO2 de todos sus vehículos en un 40 por ciento antes de 2025 y, para lograrlo, centrará sus esfuerzos en materia de electrificación.
El primer paso lo dio con la familia de híbridos enchufables Recharge; sin embargo, el verdadero camino que la marca tomará queda descubierto con el XC40 Recharge Pure Electric, su primer vehículo 100% eléctrico, del cual tuvimos la oportunidad de ponernos tras el volante.
Ojo, no caigas en confusión, ya que, pese a estar basado en el XC40, su comportamiento dinámico no tiene nada que ver con su hermano a combustión, y ni siquiera con el híbrido, ya que se trata de un vehículo de personalidad propia.
Durante la prueba de manejo, curiosamente me encontré con un par de XC40 en el camino. Algo hasta cierto punto normal, ya que se trata del modelo más vendido de Volvo. Pero lo que me llamó la atención, es que los conductores clavaban su mirada en el modelo que conducía.
Para ser francos, los cambios son pocos, pero hay uno en especial que marca la diferencia y se trata de la ausencia de una parrilla tradicional. Ya que en su lugar se cuenta con un panel al color de la carrocería, donde se encuentra el logo de la marca.
Pudiera parecer una variedad simple, pero es más que suficiente para darle una imagen “espacial” que es un imán de miradas.
Mi mente no deja de asociarlo con la elegante y futurista EVA de Wall-E, sí, la misma sonda que tenía la misión de encontrar vida en una Tierra colapsada por la contaminación y la basura. Ahora que lo pienso ambos personajes tienen mucho en común.
Los distintivos estéticos continúan con una leyenda “Recharge” en el poste C y un pequeño emblema en el portón trasero. A ello habría que sumarle que se supone sería la tapa del depósito de combustible, ahora alberga el puerto de recarga.
Puertas adentro, sigue la misma tónica que el exterior, ya que prácticamente todo se mantiene igual. Tal vez el diseño escandinavo no será el más exuberante y por el contrario apuesta por la sencillez y limpieza de líneas, pero en cambio, los materiales y ensambles, como todo buen Volvo, son muy buenos.
La marca ha sido cuidadosa para que el XC40 Recharge Pure Electric no sólo sea amigable con el medio ambiente al ser un cero emisiones, sino también en su fabricación ha usado materiales sustentables como con la alfombra interior que está hecha de plástico reciclado.
Sin embargo, es al momento de querer encender el vehículo que nos percatamos del primer gran diferenciador (el principal a mi parecer) y es la ausencia de un botón de encendido tradicional. La solución para solventar esto, es muy curiosa y efectiva, ya que sólo basta con portar el control en todo momento, acomodarse en el puesto de mando, pisar el freno y colocar la palanca en Drive o Reversa para dar movilidad.
El sistema de infoentretenimiento de la gran pantalla táctil central de 9 pulgadas ha mejorado enormemente, ya que estamos ante el primer auto del mundo en utilizar el sistema de infoentretenimiento Android Automotive OS de Google. Cuenta con seguridad y tecnología.
- El dato: Emplea una batería de iones de litio con capacidad de 78 kWh que va montada en el piso del vehículo. La autonomía anunciada por la marca es de 418 km.