Tras hacer su debut internacional hace unos meses, la sexta generación de la Honda CR-V ya se encuentra rodando por los caminos de nuestro país. Tal y como sucedió con el Civic, se trata de una gran evolución que supone un gran avance con respecto a su antecesora.
Esta confortable Runabout Vehicle, mejor conocida sólo como CR-V, es un modelo de gran relevancia para la marca. Originalmente se presentó en 1995 y se convirtió en un precursor directo de las SUV modernas. A México llega la segunda generación como modelo 2002, y desde entonces se ha colocado entre las más vendidas en nuestro país. Incluso se llegó a producir aquí.
Pero no sólo México tiene un enorme gusto por esta SUV, ya que durante 2001 se colocó como el tercer modelo más vendido en todo el mundo tan sólo por detrás de Toyota RAV4 (su eterna rival) y del Corolla Sedán.
Diseño. Encontramos elementos ya clásicos como las calaveras superiores, que han sido un distintivo de este automóvil desde su origen. Sin embargo, no se trata de un modelo continuista, ya que, en realidad, supone una grata mejora con respecto a sus antecesoras que, francamente, destacaban por la practicidad, pero no precisamente por su atractiva figura.
Es así, que más que una “estiradita”, esta CR-V 2023 adopta un nuevo lenguaje de diseño con trazos que tienen mucho de Civic, con líneas serias, pero más audaces. Además, la versión Touring, que es la que probamos, se distingue por contar con elementos en negro como parrilla, rines de 19 pulgadas y barras en el techo, lo que le confiere una imagen más deportiva.
Interior, tecnología y conectividad. Puertas adentro, nos recibe un habitáculo con un diseño inspirado directamente del Civic. Una rejilla que se fusiona con las salidas del aire acondicionado que recorre lo ancho del tablero. Los plásticos, más que suntuosos, se notan de gran calidad. El volante y pomo de la palanca están forrados en piel, pero los asientos en piel sintética de color claro merecen mención aparte por el confort que brindan a los tripulantes.
En materia de conectividad resalta la pantalla de 9 pulgadas posicionada en forma de tableta. La conexión Android Auto y Apple CarPlay es una garantía y también cuenta con asistencias OTAS al momento de conectarse con una red WiFi. El sistema de audio es de 12 bocinas y está firmado por Bose.
También destacan el clúster digital de 7 pulgadas, así como el cargador inalámbrico para smartphones. Adelante se cuenta con puertos USB y USB Tipo C, mientras que atrás sólo son de esta última configuración.
Cuatro ocupantes viajarán a “sus anchas”, y un quinto, incluso, viajará cómodamente.
Manejo. Bajo el cofre, esta sexta generación recurre al ya conocido y mejorado motor de cuatro cilindros de 1.5 litros turbo capaz de entregar 188 hp y 177 lb-pie de torque, mismo que se acopla a una transmisión automática CVT con cambios simulados y paletas detrás del volante.Las suspensiones son independientes en ambos ejes. La aceleración es buena y si bien no es deportiva, sí es ágil y para ser sincero cumple cabalmente con la misión de ser un vehículo familiar. En autopista destaca el equilibrio entre confort y firmeza.
