Tuvieron que pasar casi 16 años para que Nissan renovara profundamente a la Frontier destinada al mercado de EU.
La actualización era muy urgente, eso sí, vale la pena saber que en estricto sentido no es una generación totalmente nueva, ya que si bien, interior, estampados y mecánica son nuevos, el bastidor (emplea una arquitectura de carrocería sobre chasis) es el mismo de la generación anterior.
El motor es un nuevo V6 de 3.8 litros que reemplaza al anterior bloque de 4.0 litros, esta mecánica, de hecho, hizo su debut en la generación saliente para el año modelo 2020. Sin embargo, para efectos de nuestro mercado, se trata de una novedad.
Aunque existe una versión de tracción sencilla, para nuestro mercado sólo estará disponible la versión PRO-4X, con lo cual tenemos capacidades fuera del camino muy serias.
Hay 3 placas protectoras para las partes bajas del motor, tanque de combustible y caja de transferencia. Asimismo, cuenta con control de ascenso y descenso de pendientes, bloqueo electrónico de diferencial trasero, mientras que del lado de los ángulos son 31.3° para el de ataque y 22.6° para el de salida. Y no podemos olvidar la función off road de la cámara de 360°, que es superútil.
Puertas adentro, se nota un cambio radical y para bien, se mantiene esa propuesta visual ruda, es funcional, pero adopta todos esos elementos de confort y conectividad tan necesarios en la actualidad.
Los plásticos en general son duros al tacto, aunque hay un par de insertos suaves y gracias al forro de cuero en asientos, volante y palanca, en general, la atmósfera es agradable.
Destaca la pantalla central táctil de 9” con excelente resolución que es fácil de utilizar y cuenta con compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, hay además cargador inalámbrico, climatizador automático de dos zonas y volante multifunción, entre otros.
En la parte trasera, el espacio para piernas es suficiente para adultos de talla media, pero podría ser mejor, asimismo, un detalle que hay que mencionar es que el respaldo atrás es demasiado vertical, por lo que un trayecto prolongado seguramente resultará cansado.
Tras el volante, me da gusto decir que la evolución es notable, la Frontier V6 es mucho más silenciosa y refinada que antes, destaca el trabajo realizado en la filtración de ruidos de trabajo mecánico, de rodamiento y de viento.
Evidentemente no es un Clase S y tampoco era la idea, pero la mejora es destacada. La marcha, si bien es razonablemente confortable, mantiene esa sensación algo nerviosa y brincona que caracteriza a las pick ups. Si tuviera que rankear la calidad de marcha de la nueva Nissan Frontier V6, te diría que es más controlada y confortable que una Tacoma, pero ligeramente por debajo de la Colorado.
Lamentablemente, en este primer contacto, no hubo oportunidad de hacer una prueba real fuera del camino, mucho menos obtener cifras de consumo, pero en esta primera impresión, la renovada pick up de Nissan mostró una cara muy mejorada.
La adición de la Frontier para EU, a la gama en México es desde mi punto de vista un acierto, creo que puede confundir un poco que todas se llamen Frontier, aunque entiendo el objetivo de construcción de la marca.