Luces diurnas LED

Grand i10, buen consumo para este megaevolucionado

Mantiene la esencia de su abuelo; es un auto cuyo refinamiento lo pone a años luz

Pantalla LCD táctil de 8” compatible con Android Auto y Apple CarPlay.
Pantalla LCD táctil de 8” compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Foto: Autocosmos

Para empezar, cabe aclarar que, en México, el Hyundai Grand i10 2021 perdió el apellido Nios.

Un elemento que en lo personal me gustó fueron las luces diurnas LED en forma de colmillo que se ubican en las orillas de la parrilla. Los faros principales para esta versión son de lupa y cuentan con ajuste de altura. Un punto negativo, es que no importa como los ajustes la distancia de iluminación con las luces bajas resulta un tanto limitada.

Puertas adentro, los plásticos en general son duros, pero de buena calidad (con respecto al segmento), y predomina el color negro, pero en el tablero y puertas, encontraremos una textura que puede ser calificada como “escamosa”. El tono aqua también lo encontraremos en las salidas del aire acondicionado, así como las costuras de los asientos y los pespuntes del volante, que, por cierto, junto a la palanca está forrado en piel sintética. Se respira un aire con cierta reminiscencia deportiva.

Todos los mandos están cerca de la mano. Cuenta con un sistema de abatimiento eléctrico de espejos. No estamos acostumbrados a ello en un auto de estas dimensiones, pero sin duda, es bien agradecido en situaciones comprometedoras.

El cuadro de instrumentos de esta versión es mixto, ya que el velocímetro es digital, mientras que el tacómetro es análogo. El aire acondicionado es manual y cuenta con dos cargadores USB, uno para conectarse al sistema de infoentretenimiento y otro de carga rápida.

Si bien el manejo rápido ha sido un punto que se ha venido mejorando desde los previos, ahora esta nueva generación presume una puesta a punto, que no sólo dista a años luz de su antecesor, sino que, además, ahora puede calificarse de hasta divertida. Es cierto, está lejos de ser deportiva, pero transmite mucha confianza al volante.

Pudimos manejarlo en carretera y la aceleración considerando la potencia y tipo de vehículo es correcta. La transmisión está bien escalonada y las primeras velocidades son cortas. Sólo hasta arriba de los 140 km/h comienza a hacerse presente un poco de nerviosismo. Las curvas en el manejo diario dejaron de ser un problema.