Frente a la amenaza que enfrenta la especie humana por haber agotado la eficacia de la penicilina como antibiótico eficaz por su uso indiscriminado, científicos de todo el mundo buscan en el lecho marino los microorganismos que sirvan para combatir infecciones bacterianas y enfermedades como el cáncer, pues en una muestra del tamaño de un terrón de azúcar hay mil millones de células. La comunidad científica global estima que de no haber avances, en 2030 morirán más personas de infecciones comunes que por cáncer.