La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA por sus siglas en inglés), alista dos misiones a Venus, el segundo planeta del sistema solar en orden de proximidad al Sol, para estudiar su atmósfera y características geológicas así como comprender por qué las dos surgieron de manera tan diferente.
Dichas misiones se realizarían entre 2028 y 2030 y se llamarán DAVINCI + (abreviatura de Deep Atmosphere Venus Investigation of Noble Gases, Chemistry and Imaging) y VERITAS (un acrónimo de Venus Emissivity, Radio Science, InSAR, Topografía y espectroscopia).
Mientras DAVINCI + mide la composición de la densa atmósfera de invernadero en Venus para comprender mejor cómo evolucionó, VERITAS mapeará la superficie del planeta desde la órbita para ayudar a determinar su historia geológica.
DAVINCI +, conjunto de una nave espacial de sobrevuelo y una sonda de descenso atmosférico, mandará inéditas imágenes de alta resolución de características geológicas en Venus llamadas “teselas”. Esas características pueden ser comparables a los continentes de la Tierra y sugerirían que Venus tiene tectónica de placas.
El llamado planeta hermano de la Tierra es similar en estructura al nuestro, sin embargo es un poco más pequeño y mucho más caliente.
Sobre el paisaje de Venus se encuentra una atmósfera espesa y tóxica que consiste principalmente en dióxido de carbono, con nubes de gotitas de ácido sulfúrico.
Científicos creen que Venus pudo tener mares de agua superficial potencialmente aptos para la vida, antes de que fuerzas desconocidas desencadenaran su efecto invernadero extremo, vaporizando sus océanos.
Como se recuerda, la Magallanes que llegó a Venus en 1990, hizo el primer mapa global de la superficie de Venus y trazó el campo de gravedad del planeta.
En 1994, Magallanes fue enviado a sumergirse en la superficie de Venus para recopilar datos atmosféricos antes de cesar las operaciones. La sonda de descenso DAVINCI +, aunque más sofisticada, tendrá un destino similar.
LRL