La NASA ha comenzado con los preparativos para sacar a la Estación Espacial Internacional (EEI) de su órbita para su destrucción segura. Para ello, la agencia espacial estadounidense ha ofrecido a SpaceX 843 millones de dólares para realizar este procedimiento. Los ingenieros esperan que el puesto orbital se rompa en tres etapas basándose en la desintegración de otras estaciones como Mir y Skylab. El principal objetivo de la misión es garantizar que los desechos espaciales de la estación lleguen al océano en lugar de a la Tierra. La estación ya muestra signos de su vejez tecnológica: hay muchos fallos técnicos, muchas fugas y además un creciente problema de basura espacial que gira alrededor de la Tierra que amenaza a la estación, por lo que se estableció que el final de la ISS llegaría en 2030.
Gráficos: Julio Loyola y Roberto Alvarado.