Octubre es considerado el mes de la concientización de enfermedades como el cáncer de mama, pero también lo es de la disautonomía, una afección que es poco conocida y que afecta a millones de personas alrededor del mundo y que puede desarrollarse a lo largo de la vida por patrones de distinto orden, como cuadros virales secundarios de Covid-19 o patologías en edades avanzadas como diabetes o Parkinson, pero también puede una persona nacer con ella. La disautonomía es un trastorno de la función del sistema nervioso autónomo, el encargado de regular funciones vitales como la respiración y el funcionamiento del sistema gastrointestinal, esta enfermedad se divide en dos principales tipos, primaria y secundaria, en la primera, se desconocen las causas, mientras que en la secundaria, se sabe que aparece por enfermedades autoinmunes. La razón por la que ocurren los cambios en el funcionamiento del sistema nervioso autónomo, es porque los nervios no se comunican como deberían y, al no enviar o recibir los mensajes de manera normal, la persona experimenta síntomas como cansancio, fatiga, desmayo y frecuencia cardíaca rápida o lenta.
Gráficos: Iki Alvarado, Roberto Alvarado y Luisa Ortega
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Disautonomía
