La Organización Mundial de la Salud informó ayer que la nueva variante del coronavirus representa “un riesgo muy elevado” para el mundo, ya que la cepa descubierta por primera vez en el sur de África era una “variante muy divergente con un alto número de mutaciones, algunas de las cuales son preocupantes y pueden estar asociadas con un potencial de escape inmunológico y una mayor transmisibilidad”, sin embargo el patógeno aún es desconocido para la ciencia y se tienen muchas incógnitas sobre éste. La OMS espera que los datos de las investigaciones en curso estén disponibles antes de que termine el año, ya que en menos de una semana al menos 13 países ya reportan casos; en Europa son 7, en África y Asia 2; en Oceanía uno y en América uno, Canadá. “La probabilidad de una mayor propagación potencial de Ómicron a nivel mundial es alta”, advirtió la OMS en una nota técnica y hasta el momento no se han reportado muertes relacionadas con la nueva variante, pero incluso si no resulta más peligrosa o mortal que las anteriores, si se propaga más fácilmente provocará más casos y más presión en los sistemas de salud y, por lo tanto, más muertes, aseveró la organización.
Gráficos: Ismael F. Mira, Roberto Alvarado y Luisa Ortega.