Investigadores de las universidades de Oregon, de EU; Curtin, de Australia y Heidelberg de Alemania en colaboración de la Agencia Geológica de Indonesia descubrieron que los llamados supervolcanes siguen siendo activos y peligrosos incluso miles de años después de una súper erupción, tras el descubrimiento publicaron sus conclusiones en Nature Communications Earth & Environment en los que explican el estudio del complejo de la Caldera de Toba, en Sumatra, donde hace alrededor de 74,000 años una erupción apocalíptica puso en riesgo a la humanidad. Las erupciones gigantescas se encuentran entre los eventos más catastróficos de la historia de la Tierra, y liberan enormes cantidades de magma casi instantáneamente, llegando a impactar el clima global hasta el punto de llevar a la Tierra hacia un invierno volcánico, que es un periodo anormalmente frío que puede resultar en una hambruna generalizada y una alteración de la población, por lo que los expertos creen que aprender cómo funcionan los supervolcanes es importante para comprender la amenaza futura de una súper erupción inevitable, que ocurre aproximadamente una vez cada 17,000 años.
Gráficos: Ismael F. Mira, Roberto Alvarado y Luisa Ortega.