Los informes de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) revelan que una nueva cepa de Covid-19, conocida como KP.3, se ha convertido en la variante dominante en Estados Unidos. Actualmente, el 25% de los diagnósticos positivos en el país corresponden a esta alteración, lo que significa que uno de cada cuatro casos está relacionado con KP.3. Los expertos señalan que la mutación está aumentando su presencia en pacientes de todas las edades en Estados Unidos. Esta cepa, es una mutación del código genético del virus que causa Covid-19, por lo que comparte muchas características con las anteriores. En cuanto a los síntomas, los afectados experimentan prácticamente las mismas manifestaciones clínicas que las infecciones por otras cepas del coronavirus. Por esta razón, la detección precisa de esta cepa depende de la evaluación por parte de un especialista. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado a esta cepa como agente “bajo vigilancia”. Aunque no se han emitido alarmas, ni siquiera en Estados Unidos, es importante hacer un seguimiento continuo del comportamiento de la variante KP.3 de Covid-19.
Gráficos: Julio Loyola y Roberto Alvarado.