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México.- El secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, recordó a las víctimas de los terremotos de 1985 y consideró como una paradoja que él haya presenciado cómo se cayó el edificio de la dependencia que ahora encabeza.
A través de su cuenta en Twitter, el funcionario hizo una remembranza: “Un día como hoy, 19 de septiembre, de hace 25 años, un sismo de gran magnitud azotó al DF. Mi memoria para los miles que ahí perecieron”.
La reflexión la hizo poco después de las 8:00 horas, cuando se recordó a las víctimas del movimiento de 8.1 grados en la escala de Richter que sacudió el territorio mexicano el 19 de septiembre de 1985 a las 7:19 horas.
En otro mensaje recordó que “mis compañeros de la (Escuela) Libre de Derecho y yo vimos colapsar ese 19/09 el edificio de la Secretaría del Trabajo en Doctor Río de la Loza y Vértiz”, en la colonia Doctores.
Esa zona, donde también se encuentra la Escuela Libre de Derecho, que igualmente sufrió daños, fue una de las más afectadas por el terremoto.
En los alrededores también cayeron el edificio del Registro Civil, una escuela secundaria y algunas cuadras más adelante, parte de las instalaciones de Televisa, en Avenida Chapultepec.
En su cuenta de Twitter, el secretario también escribió esta mañana que considera paradójico haber visto caer el edificio de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) y 25 años después, encabezarla.
“Es toda una paradoja pero nunca imaginé que 25 años después encabezaría esa secretaría. Doble recuerdo y sentimiento, pues”, externó.
Alguien que sigue al secretario por esa red social le dijo que está sorprendido de que hace 25 años el ahora secretario ya fuera universitario y le pidió que le precisara cuántos años tiene.
Al respecto, Lozano señaló que tiene 47 años y que su cumpleaños es en noviembre.
Otra persona le preguntó al secretario si entre los alumnos de la Escuela Libre de Derecho que vivieron el terremoto en las instalaciones se encontraba el presidente Felipe Calderón.
A ello, el secretario contestó que no, que para entonces, el Ejecutivo federal ya había terminado su formación universitaria y había salido de la escuela “unos meses antes”.