Las extorsiones telefónicas crecieron un 90% en lo que va del presente sexenio, al pasar de 77 mil 807 reportes de enero – agosto de 2012 a 148 mil 147 en el mismo periodo de 2018.
Lo anterior de acuerdo a los datos arrojados por el Programa No Más Extorsiones Telefónicas del Consejo Ciudadano de la Ciudad de México.
Las denuncias hechas por los ciudadanos del área metropolitana al 5533 5533, y del resto del país al *5533, así como a través de la app para teléfonos inteligentes No Más Extorsiones, revela un aumento constante del delito de 2012 hasta 2017, donde tuvo una ligera baja, para retomar un alto crecimiento en este año.
Así, en los primeros 8 meses del año 2012 se registraron 77 mil 807 reportes; en el mismo periodo de 2013 se incrementaron a 105 mil 169.
Para 2014 la cifra subió a 127 mil 229 y en 2015 volvió a subir a 129 mil 766.
Al año siguiente, 2016, fueron 140 mil 284 reportes y en 2017 presentó una ligera baja, al sumar 138 mil 510, pero en este año se dispararon los reportes hasta sumar 148 mil 147.
Por lo que se refiere a las extorsiones consumadas, éstas presentaron un aumento a lo largo de estos años, pero desde 2017 van a la baja.
Así, de enero a agosto de 2012 se reportaron 768 casos consumados; en 2013 subieron a mil 138; en 2014 fueron mil 307; en 2015 el incremento ya fue mínimo, con 1,348.
En 2016 alcanzaron mil 375 y en 2017 ya presentaron una caída importante al sumar 938, y en lo que va de este año solo van 914.
Lo anterior demuestra que la efectividad de los extorsionadores creció en el sexenio.
Pero desde el año pasado la sociedad en su conjunto volvió a contener el delito, principalmente a través del apoyo de la difusión de los modus operandi del delito y las herramientas dadas para atenderlo, como la Línea Ciudadana, el 5533 5533, y la App No Más Extorsiones.
El principal modus operandi de los extorsionadores
Por lo que se refiere al modus operandi, en este sexenio sigue prevaleciendo en primer lugar los secuestros virtuales, perpetrados supuestamente contra los hijos.
Coloquialmente esta modalidad se conoce como la del “chillón”, donde se escucha a un presunto menor de edad llorando diciendo que ha sido privado de su libertad, o es un delincuente que amenaza con hacerle daño a la familia de la víctima.
La mitad de los intentos de extorsión se siguen dando de entre las 12 del día y hasta las 18:00 horas; 4 de cada 10 personas que reciben una de estas llamadas tiene entre 31 y 45 años.
Y el 10% son mayores de 60 años. El 61% de los intentos se siguen realizando a teléfonos fijos y el 45% paga con depósitos bancarios, principalmente en tiendas de conveniencia.
El Consejo Ciudadano recuerda a la ciudadanía la regla básica de la prevención ante este delito: colgar y llamar al 5533 5533 para realizar el reporte.
Y para las personas que tengan teléfono inteligente con sistema operativo Android, descargar la aplicación No Más Extorsiones, que alerta sobre la recepción de este tipo de llamadas.
NUNCA proporciones información personal y mucho menos de índole económico vía telefónica, redes sociales o a extraños.
La mayoría de las extorsiones telefónicas se llevan a cabo por la información que la propia víctima proporciona a través de presuntas encuestas, premiaciones u ofrecimiento de productos.
Qué hacer si recibes una llamada de extorsión telefónica
Si recibes una llamada en la que te hacen escuchar una grabación de un supuesto familiar que te pide auxilio, debes:
Mantener la calma.
Identifica el número telefónico del que recibes la llamada, edad aproximada, tono de voz, lenguaje utilizado y sonido ambiental.
CUELGA!!!
Localiza al familiar presuntamente secuestrado.
Una vez localizado tu familiar reporta el número telefónico del que recibiste la llamada al 5533-5533 a la línea de orientación y denuncia del Consejo Ciudadano.
Si no logra localizar a su familiar, comunícate al Centro de Atención Telefónica de la PGJDF al 5200-9000 o al Centro de Atención a Personas Extraviadas o Ausentes (CAPEA) al 5345-5598.
Recomendaciones
Orienta a niños y adultos mayores que se abstengan de proporcionar información a personas desconocidas.
Concientiza a los jóvenes para que no apaguen los celulares cuando salen de su casa y mantengan contacto con la familia.
No realices grabaciones en tu buzón telefónico donde menciones tu nombre o de la familia a la que se está llamando.