Con melodías como “La Llorona” o “Cielito Lindo”, decenas de músicos exigieron justicia por el ataque con ácido del que fue víctima María Elena Ríos, saxofonista de 26 años, que fue quemada con ácido, en septiembre pasado.
En punto de las 13:30 horas los manifestantes llegaron con sus instrumentos, acompañados de integrantes de colectivos feministas, en respuesta a una convocatoria que lanzó una asociación de la entidad oaxaqueña, la cual busca dar apoyo a la mujer que sufrió quemaduras en 90 por ciento de su cuerpo.
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Con pancartas en mano, en las que se leía: “justicia para Elena” y “no estás sola; ni una más”, los músicos exigieron dar con el responsable del ataque a Ríos Ortiz, quien le arrojó ácido, cuando ésta salía de su hogar, ubicado en una colonia popular del municipio de Huajuapan de León, según el expediente 31351/HUAJUAPAN/2019, que se inició por lesiones dolosas y no por intento de feminicidio, a pesar de la gravedad de las heridas que presenta la mujer.
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Luego de su agresión, la víctima, acusó a un exdiputado del PRI y empresario de una gasolinera, quien estuvo ligado con ella en algún momento y que la había amenazado de muerte con anterioridad.
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El viernes pasado, la saxofonista fue trasladada vía aérea al Centro de Nacional de Investigación de Quemados del Instituto Nacional de Rehabilitación Luis Guillermo Ibarra, en la Ciudad de México, luego de estar internada en el Hospital General Doctor Aurelio Valdivieso, en su estado natal, donde le practicaron diversos injertos de piel.
En entrevista, el director de ese nosocomio, Ernesto Garzón, indicó que se le realizaron tres intervenciones quirúrgicas, en un periodo de tres meses, ya que el “ácido corrosivo” le provocó lesiones profundas en la cara, el tórax y y las piernas.
Sin embargo, explicó que la cicatrización de sus lesiones requiere más tiempo para preparar las zonas afectadas y evitar así, en lo posible, el rechazo, ya que es necesaria la granulación de la piel (fase de recuperación que admita la adherencia del tejido) y la evolución es más compleja por el tipo de químico utilizado en la agresión.
El dato: En la capital, las agresiones con ácido se penalizan con hasta 12 años de prisión. La sanción puede aumentar si el atacante tuviera una relación familiar o cercana con la víctima.
“Es la segunda vez que le hacen injertos de su misma piel y cada vez las piernas están más dañadas, ni siquiera saben de dónde quitarle más piel”, reportó su hermana.
En tanto, la familia de María Elena envió una carta al Presidente Andrés Manuel López Obrador para pedir ayuda para la atención y rehabilitación de la saxofonista, y solicitar protección, pues temen por su seguridad, ya que las amenazas de muerte continúan para la víctima.
kl
