Luego de siete días de tomadas las instalaciones de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) en la Ciudad de México por un grupo de personas que demandan atención, autoridades de la dependencia lograron entrar con apoyo policial a realizar sus actividades cotidianas.
Encabezadas por la titular de la dependencia, Mara Gómez Pérez, los trabajadores ingresaron a las instalaciones aún con resistencia de los quejosos, quienes denunciaron ser agredidos por las mismas autoridades.
Al llegar a las instalaciones, pidió a los manifestantes retirar los objetos que obstruían el paso. Aunque hubo algunos empujones, la mayoría de los empleados entró sin mayores contratiempos.
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El 19 de febrero, la CEAV denunció que un grupo de personas encabezadas por Carlos Vanda tomó las instalaciones como forma de protesta para que resolvieran su caso, ya que fue víctima de secuestro en Chihuahua.
En diciembre del año pasado, Vanda fue recibido por la funcionaria para conocer los detalles de su caso, como el hecho de que la comisión local ya estaba trabajando en este. Pero el manifestante exigió atraer su caso a la ciudad.
En represalia, los quejosos dejaron desechos humanos frente a la puerta principal y tomaron el edificio, al grado de retener a tres trabajadores el fin se semana.
En este contexto, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) exhortó a las autoridades de la CEAV a evitar denunciar penalmente a las personas, con el objetivo de que se privilegien sus garantías y se agote el diálogo.
