Bajó uso de bolsas plásticas 17%, pero ya sube de nuevo

Durante este año, en la Ciudad de México se redujo de manera importante la producción de basura de plásticos en comparación con 2019, especialmente durante el inicio de la pandemia de Covid-19; sin embargo, a partir de junio, la cantidad de residuos experimenta una recuperación y, aunque todavía no iguala a los registros de los mismos meses del año pasado, hay un incremento que coincide con el retorno de algunas actividades económicas.

De acuerdo con la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) de la Ciudad de México, en enero de 2019 se registró un promedio diario de 8 mil 377 toneladas de residuos sólidos recolectados; en ese mismo mes de este año, la recolección fue de 7 mil 233, lo que implica una reducción de 13.77 por ciento.

En febrero, cuando apenas comenzaban a registrarse los primeros casos de Covid-19 en el país, pasó de 8 mil 450 en 2019 a 7 mil 365 en 2020, es decir, una disminución de 12.8 por ciento.

Al mes siguiente, en marzo, la reducción fue también de 12.8 por ciento, pues el año pasado, el promedio de recolección mensual fue de 8 mil 540, y el de este año 7 mil 444 toneladas.

En abril, de 8 mil 343 toneladas se redujo a 7 mil 195, es decir, 13.7 por ciento. Al siguiente mes, la recolección tuvo su disminución más importante, de 17.75 por ciento, al pasar de 8 mil 84 toneladas a más de 6 mil 500 este 2020.

En junio continuó la desescalada de basura, aunque en menor proporción: en 2019, la recolección promedio diaria fue de 8 mil 400 contra 6 mil 947 de este año, porcentaje de reducción de 17.2.

A partir de junio, si bien continúa la baja de 2020 respecto a 2019, la tendencia ya muestra señales de recuperación en el número de toneladas de residuos.

Mientras en julio del año pasado, las autoridades reportaron un promedio diario de 7 mil 971, en 2020 se alcanzaron 7 mil 331, apenas 8 por ciento menos.

En agosto, la disminución fue de 7.3 por ciento, de 7 mil 698 a 7 mil 130; y en septiembre de 6.69 por ciento, de 7 mil 496 a 6 mil 993 toneladas.

La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México señala, en su informe por su segundo año de labores, como parte de la glosa del Informe de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, que parte de la problemática derivada de la generación de una gran cantidad de residuos sólidos en la capital se debe en buena medida a “la idea de confort” que ofrece el consumo de productos desechables, especialmente residuos plásticos.

“Ello llevó a las ciudades, y entre ellas a la Ciudad de México, a una gigantesca generación de residuos plásticos que, además de destruir la imagen del hermoso paisaje de la cuenca, por la acumulación de botellas, bolsas y otros enseres plásticos, contribuye a la contaminación local, a la emisión de gases de efecto invernadero y al deterioro de su biodiversidad”, dice el documento al que tuvo acceso La Razón previa a su presentación en el Congreso de la CDMX este 12 de octubre.

Con este argumento, desde hace 10 meses entraron en vigor las reformas que modificaron la Ley de Residuos Sólidos de la CDMX, donde se prohíbe el uso y distribución de bolsas de plástico en negocios; sin embargo, hasta el momento no hay sanciones por incumplimiento.

Según el mandato, quienes incumplan dicho lineamiento podrían tener una multa entre 42 mil 245 y 168 mil 980 pesos, pese a esto, la dependencia sólo ha realizado apercibimientos, es decir, llamadas de atención: de enero a marzo, fueron 103 , después hubo una pausa por la pandemia; los operativos se retomaron en junio y julio, meses que reportan 28 apercibimientos más.

Apenas el pasado viernes, la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac) envió una carta a la Jefa de Gobierno, con la finalidad de solicitar la prórroga de la prohibición de productos plásticos, como cubiertos, popotes y envases, entre otros, la cual entrará en vigor a partir de 2021, según establece la Ley de Residuos Sólidos reformada.

El presidente de la Anipac, Aldimir Torres Arenas, aseveró que, contrario a lo que se cree, los plásticos no son el peor problema de la generación de residuos sólidos en la Ciudad de México, pues la mayoría de éstos son orgánicos, además de que el plástico per se no contamina, “lo que contamina es la cantidad de éste”; no obstante, aceptó que la industria debe “fomentar el reúso y el reciclaje, rediseñar y repensar los materiales”.

En una entrevista para La Razón, consideró que la pandemia no les ha dado la posibilidad de producir nuevas tecnologías en la lógica de la Jefatura de Gobierno, que conduce a evitar afectaciones ambientales por exceso de residuos.

“No es tanto que se tiren plásticos, lo que podemos pensar es que gran parte de estos materiales se recuperan, hay tasas muy altas de reciclaje en otros país” que podrían imitarse aquí, afirmó.