El repunte en el número de contagios de Covid-19 en la CDMX es notable no sólo en el criterio de hospitalizaciones. En el último informe, del 2 de diciembre, a través de mensajes vía SMS y en Locatel, se detectaron 391 sospechosos leves de la pandemia, una cifra de relevancia al compararla con los números que se registraron en fechas previas a octubre, cuando el promedio diario no rebasaba los 100, esto significa un salto de 74 por ciento.
Por otro lado, el índice de positividad —que refleja el número de pruebas PCR positivas a la pandemia por cada 100—es de 30 por ciento al 2 de diciembre. A partir del 20 de noviembre, el Gobierno de la CDMX comenzó a aplicar también pruebas rápidas, con la inclusión de los test de antígenos. En las más de 70 mil realizadas a la fecha, el índice de positividad es de 20.3 por ciento.
La Organización Mundial de la Salud considera que un índice de positividad cercano a 10 por ciento significa que la enfermedad está bajo control.
Esto, sumado a la ocupación hospitalaria, que se ubica a nueve puntos del semáforo rojo, pone a la capital en una situación de alto riesgo.
El Gobierno capitalino tiene en sus esquemas de medición a los usuarios del Servicio de Información SMS Covid-19, al que las personas pueden mandar un mensaje en caso de que tengan sospecha de coronavirus, por presentar síntomas compatibles. El objetivo de este sistema de mensajería es que el o la paciente pueda orientarse y descartar o confirmar si tiene la enfermedad.
En mayo, considerado el punto más alto en la detección de casos de Covid-19, hubo días en los que se reportaron más de 900 sospechosos. En los meses posteriores, las llamadas y mensajes fueron a la baja, para el 15 de septiembre hubo 53, una tendencia que permaneció así hasta inicios de octubre.
Respecto al servicio de emergencia 911, al que la ciudadanía recurre por casos de gravedad y que requieren hospitalización, también se registran incrementos sostenidos. Por ejemplo, el 2 de octubre, la Agencia Digital de Innovación Pública anotó 47 llamadas, 37 de ellas requirieron despacho de ambulancia, y el 23 de octubre fueron 65 reportes, de los que 46 resultaron de gravedad. El corte del 2 de diciembre tuvo 152 llamadas, de las que 119 solicitaron una ambulancia.
Se prevé que este viernes, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, anuncie nuevas medidas para fortalecer la atención a la pandemia, entre las que destaca la ampliación de la capacidad hospitalaria. En múltiples ocasiones, la mandataria ha referido que se buscará un equilibrio entre el cuidado de la salud y la activación económica.
Capitalinos salen a granel
La movilidad de los vehículos particulares en la Ciudad de México ya no tiene gran diferencia con la de los días previos a la pandemia: a partir del pasado 20 de noviembre, los picos de normalidad son cada vez más constantes, no así al hablar del resto de los sistemas de transporte que aún tienen reducciones, como el Metro.
A pesar de la reducción general de usuarios en todo el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, La Razón ha dado cuenta diariamente de que una de las estaciones con más aglomeraciones es Pantitlán, donde alrededor de las 19:00 horas es nula la sana distancia, además de que los filtros cercanos a los andenes provocan que el estancamiento de las multitudes dure hasta 10 minutos en el pasillo de correspondencia con la Línea A.
En esos casos, aunque la mayoría de personas porte cubrebocas, se sabe que 80 por ciento de usuarios del Metro lo usa, la sana distancia se hace imposible.
Además, en últimos días y a pesar de los cercos colocados en las inmediaciones de la Basílica de Guadalupe, hay peregrinos que acuden al templo mariano.
Ayer, cientos hicieron largas filas en las tiendas Best Buy, luego de que la empresa anunciara el cierre de sus sucursales en el país. Imágenes en redes sociales evidenciaron a jóvenes y adultos amontonados en plazas comerciales, en espera de comprar productos a precio de liquidación.
La mayor aglomeración se dio en la plaza Forum Buenavista, en la alcaldía Cuauhtémoc, donde la mayoría de clientes llegó antes de que abrieran las tiendas de Best Buy; pese a que la empresa no permitió el acceso total de los consumidores, procurando la sana distancia, afuera, las filas hacían inviable la separación adecuada entre las personas.