El tercer y último informe de la empresa DNV sobre el colapso de la Línea 12, indica fallas en las inspecciones, falta de mantenimiento y deficiencias en su construcción, como causas de la tragedia en la que perdieron la vida 26 personas.
Así lo dio a conocer este lunes el diario El País, que obtuvo la última entrega del peritaje que realizó la empresa noruega a petición del Gobierno de la Ciudad de México, tras el colapso del 3 de mayo de 2021.
La información se hizo pública a días de que la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, anunció la rescisión del contrato con DNV, al argumentar que la tercera entrega del informe es "tendenciosa" y se realizó sin cumplir con la metodología establecida.
De acuerdo con el periódico, en el peritaje se señala que hubo factores determinantes en el colapso que van desde la construcción de la obra hasta su operación.
"El documento, de carácter no definitivo pero coincidente en lo esencial con las posteriores versiones, según las citadas fuentes, fue marcado como confidencial por DNV y consiste en el análisis de las 'causas de raíz' que llevaron a que la estructura ferroviaria perdiera estabilidad y se viniera abajo", se lee en la publicación firmada por tres periodistas.
En el tercer documento, señala que "el desgaste estructural provocado a lo largo del tiempo por una supuesta falta de mantenimiento y de inspecciones regulares", y analiza a las tres administraciones que han estado a cargo de la llamada Línea Dorada, desde Marcelo Ebrard (2006-2012), que la construyó; la de Miguel Ángel Mancera (2012-2018), cuando la Línea se suspendió durante año y medio; y la actual, encabezada por Claudia Sheinbaum.
En el texto, señala cuatro “barreras” que pudieron haber evitado las consecuencias fatales que hubo hace un año, las cuales tienen que ver con el diseño, controles administrativos y falta de inspecciones preventivas.
“La primera barrera que falló, de acuerdo con DNV, fue el diseño, que no se ceñía a lo que estipulan las especificaciones estadounidenses para la construcción de puentes, un estándar de referencia en el mundo".
La segunda barrera que faltó fue la certificación de la obra por parte de un ente independiente, además de una deficiente supervisión de la construcción.
En tercer lugar, señala que faltó la instalación adecuada de los pernos, lo cual, "comprometió la integridad de esta estructura".
Y, la cuarta barrera que se señala es falta de mantenimiento e inspecciones sobre la Línea 12, pues de acuerdo con la publicación, la empresa noruega aseguró que no hay registro de que se hayan hecho las inspecciones necesarias desde su construcción en 2012.
lemm.
