Capitalinos prefieren portarlo por precaución

Uso de cubrebocas persiste en CDMX, aun sin ser obligatorio

La mayoría de usuarios del Metro todavía utiliza la mascarilla, de manera voluntaria; especialistas en salud ven riesgo en relajar esta medida, por un eventual repunte en invierno

La mayoría de los citadinos prefiere seguir usando la mascarilla, como se aprecia en esta imagen captada ayer en la calle Madero.
La mayoría de los citadinos prefiere seguir usando la mascarilla, como se aprecia en esta imagen captada ayer en la calle Madero. Foto: Eduardo Cabrera, La Razón

El anuncio de que el cubrebocas dejó de ser obligatorio tanto en espacios cerrados como abiertos en la Ciudad de México no modificó su uso entre los capitalinos, quienes en su mayoría aún lo portan “por precaución”, incluso al aire libre.

En el Centro Histórico aún se puede observar a decenas de ciudadanos transitando por las calles abarrotadas con el cubrebocas puesto, al igual que en comercios y restaurantes, en donde los comensales únicamente se los quitan para comer.

Erandi Domínguez, una capitalina de 34 años que aguarda sentada en la Alameda Central, afirmó a este diario que aunque los contagios de Covid-19 han bajado lo suficiente como para relajar el uso de este artículo, aún no tiene “la confianza” como para quitárselo en la calle.

“Me siento más cómoda usándolo, por costumbre o porque todavía se siente el temor de que pueda haber contagios; aunque sí bajaron mucho, no me siento con la confianza de andar libre”, explicó.

Para esta ciudadana es de “mucha relevancia” que la gente lo siga usando, porque “no sabemos si otra vez va a haber un repunte como los pasados”. Por ello, consideró oportuno que en lugares como el transporte público o las escuelas se siga usando.

“Sí, en la escuela de mi hija nos pidieron que siga, que ni se los quiten y nosotros estamos de acuerdo”, comentó.

Durante un recorrido realizado ayer, se pudo constatar la forma en que a primera hora de la mañana, en plena hora pico, decenas de ciudadanos salían de varias estaciones del Metro aún con cubrebocas.

Para algunos usuarios, “no tiene caso” retirarlo al salir de este sistema de transporte, uno de los espacios en donde existe mayor riesgo por las aglomeraciones.

La únicA duda que queda va a ser este periodo de frío que viene prácticamente desde ya, que empiezan los periodos de enfermedades respiratorias, en los que se sabe que va a haber un repunte
Carlos Alberto Pantoja, Especialista de la UNAM

Alonso, un habitante de la ciudad que todos los días baja de la estación San Lázaro para tomar un RTP rumbo a su lugar de trabajo, considera que la nueva recomendación es un buen indicador acerca de la pandemia. Sin embargo, aún teme quitarse el cubrebocas.

“Yo creo que todavía nos va a costar trabajo hacerlo voluntario, por voluntad yo me lo dejo todo el día, aunque ya no haya casi contagios (...) pero qué bueno que ya se anunció que es voluntario, significa que está avanzando esto”, comentó.

Otra joven, quien también porta el cubrebocas mientras espera en la fila para el camión, considera que ahora es cuando más se debe tener cuidado, toda vez que consideró que la nueva disposición podría incentivar que la gente relaje más las medidas.

“Nunca me lo he quitado, menos ahora, si antes no todos lo usaban, ahora habrá más gente que ya no lo use”, explicó la estudiante del Estado de México, quien viaja todos los días a la ciudad para ir a la universidad.

Especialistas, aún con dudas

Carlos Alberto Pantoja, académico del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, consideró que la nueva recomendación en el uso de cubrebocas es “un adelanto” de que la pandemia por Covid-19 ya se está resolviendo, aunque, advirtió, aún habrá que ver cómo evoluciona la enfermedad durante esta temporada invernal.

“La única duda que queda va a ser este periodo de frío que viene prácticamente desde ya, que empiezan los periodos de enfermedades respiratorias, en los que se sabe que va a haber un repunte.

“En Europa ya está pasando, pero es un repunte esperado. Vamos a ver cuál es el desenlace, pero si no pasa nada sorpresivo, pasando esta ola podría declararse el fin de la pandemia”, dijo.

En entrevista con La Razón, el especialista explicó que el hecho de que el uso del cubrebocas ahora sea voluntario está relacionado con un asunto más “de precaución”, pues portar la mascarilla “ayuda más en periodos de alta transmisión” del virus.

Añadió que podría ser útil hacerlo voluntario ahora, por si en diciembre o enero, meses en los que puede haber repunte de casos, las autoridades piden reajustar su uso.

Por otra parte, destacó que, si bien el Covid-19 nunca va a desaparecer, es probable que en el futuro el virus se convierta en “una gripe más”, por lo que tampoco será necesario vacunarse de manera anual, sino aplicar refuerzos cada determinado tiempo, “por ejemplo cada cinco años”.

Por separado, Vanessa López Guerrero, académica de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), consideró que, si bien el riesgo de contagio es menor actualmente, volver voluntario su uso podría ser “riesgoso” debido a que comienza la temporada invernal.

“El riesgo es menor, pero justo por eso es por lo que no hay que relajar las medidas, porque ya lo hemos vivido en las otras olas de contagios; cuando se empiezan a relajar las medidas vienen estos repuntes, y desgraciadamente aún tenemos una gran población sin vacuna, como es el caso de los pequeñitos”, advirtió.