Durante la sesión ordinaria de este jueves, el Pleno del Congreso aprobó un punto de acuerdo para exhortar a los titulares de las 16 alcaldías a inspeccionar y garantizar que el mobiliario urbano de la ciudad esté en buenas condiciones, con el fin de evitar algún accidente o pérdida de vidas humanas.
Lo anterior, tras la muerte de dos mujeres la semana pasada al caer en una coladera abierta, en Iztacalco.
El punto de acuerdo fue presentado por la diputada del PT María de Lourdes Paz Reyes, en el cual solicitó a los gobiernos locales realizar las acciones pertinentes para cumplir con lo establecido en el artículo 42 de la Ley Orgánica de Alcaldías de la Ciudad de México en materia de obra pública, desarrollo urbano y servicios públicos.
Al presentar la propuesta, la legisladora recordó que el pasado 10 de noviembre, las hermanas Sofía y Esmeralda Sánchez Canchola perdieron la vida en las inmediaciones de la alcaldía Iztacalco, al caer en una coladera sin tapadera cuando bajaban de un puente peatonal.
“No es un hecho aislado, como se puede constatar, pues los registros y alcantarillas sin tapas son algo frecuente causado por la falta de mantenimiento a la infraestructura urbana, omisión de las autoridades y por el robo y la comercialización de las mismas”, señaló.
La diputada denunció que las personas que se dedican a reciclar, suelen acumular fierro para luego revenderlo a empresas más grandes o compañías fundidoras, por lo que esto es un peligro.
De acuerdo con Paz Reyes, el precio pagado por kilogramo de este material es de alrededor de cinco pesos, mientras que una tapa regular pesa alrededor de 40 o 50 kilogramos, de ahí que sean un negocio para quienes se dedican a ello.
La diputada explicó que este delito de robo genera al Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), un costo aproximado de diez millones de pesos al año por reposición de tapas y accesorios robados.
