La algarabía regresó a las calles de la Ciudad de México este 2023, con la venta de juguetes y roscas de reyes, pese a los altos costos que deja la llamada cuesta de enero.
En la víspera de este 6 de enero, miles de ayudantes de los Reyes Magos abarrotaron romerías, plazas comerciales, pero sobre todo las principales calles del Centro Histórico, en busca de los precios más accesibles para cumplir con los deseos de los más pequeños.
En las calles de Corregidora, Correo Mayor, República de Bolivia y República de Colombia, ésta última donde se ubica el llamado “paraíso de los juguetes”, no cabía ni un alfiler. Ayer se vio ahí a miles de familias cargando bolsas con juegos de mesa, muñecas, mochilas y balones, entre otros juguetes.
A Paulina, de 37 años, le tocó ayudar a los Reyes para llevarle juguetes a los tres pequeños de su casa, por lo que aprovechó el descanso que le dieron en su trabajo para ir a comprarlos.
Con un juego de muñecas y varias prendas de ropa en la mano, la ciudadana contó a La Razón que para ella, cada año “la cuesta de enero cuesta más”, por lo que ahora le pide a sus hijos que “sean considerados con los Reyes” y mejor pidan una sola cosa.
“Piden muchos aparatos electrónicos, muchos juegos digitales, ahora ya no sólo es el juguete que de más chicos querían, ¿no? Ahora piden que juegos de video, que un play que cuesta 12 mil pesos… la niña les pidió la funda para la tableta”.
Piden muchos aparatos electrónicos, muchos juegos digitales, ahora ya no sólo es el juguete que de más chicos querían, ¿no? Ahora piden que juegos de video, que un play que cuesta 12 mil pesos… la niña les pidió la funda para la tabletaPaulina, Ayudante de Reyes Magos
Entre gritos de comerciantes que ofertan juguetes y ropa, muchos ayudantes se acercan a los puestos a “pedir precio” antes de animarse a gastar de forma desmedida. Es el caso de otro ciudadano, para quien lo más costoso fueron las bicicletas y las patinetas, que en tiendas comerciales vio en hasta cinco mil pesos.
“Aquí (en el Centro) encontré a mitad de precio una bicicleta, de marca, buena; mejor me la llevé de aquí”, dijo.
Un vendedor ambulante instalado en la calle Corregidora contó a este medio que las ventas de este año aún no han superado sus expectativas, aunque nuevamente se ve a miles de personas comprando, como no ocurría en los últimos dos años.
Para otro comerciante, ver “tanta gente” le animó al inicio del año, pues para él “es como si regresara la fiesta, la vida, los niños jugando, riéndose en el Zócalo, y acá las ventas”, después de los cierres de los últimos años.
Ante los elevados precios de los juguetes, algunos capitalinos apostaron por visitar las romerías locales instaladas en puntos estratégicos de la ciudad, como las de las alcaldías Gustavo A. Madero, Azcapotzalco y Cuauhtémoc, donde se instalaron decenas de puestos con juegos de todo tipo y precio.
Otros apostaron por aprovechar esta época para salir a “ayudar” a los Reyes y también darle un respiro a su economía con la venta de juguetes afuera de sus casas.
En un puesto ambulante en una banqueta del municipio mexiquense de Nezahualcóyotl, cerca de la GAM, una familia salió a vender juguetes a bajo costo para “aquellos que no pueden salir muy lejos”.
Entre la mercancía destaca un carrito de supermercado de plástico en 800 pesos, un patín del diablo en mil 200, peluches de hasta 90 pesos y juegos de té en 550 pesos.
Desde las primeras horas de este jueves, pero sobre todo por la tarde y noche, e incluso durante la madrugada, decenas de personas hicieron uso del transporte público para trasladar los regalos.
En estaciones como Zócalo, Allende, Tepito y Garibaldi, se vio a decenas de ayudantes cargando pelotas, cajas y demás regalos de grandes dimensiones para sorprender a niñas y niños esta mañana.
VIGILAN 5 MIL POLICÍAS
Para resguardar la seguridad de los miles de ayudantes que abarrotaron calles y plazas, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, anunció el despliegue de más de cinco mil policías, quienes desde la tarde del miércoles hicieron rondines en romerías y puntos de comercio.
Además, Metrobús, Trolebús y RTP extendieron sus horarios de servicio durante la madrugada de este 6 de enero, para que los Reyes Magos y sus ayudantes pudieran completar sus listas de regalos.
Y es que las aglomeraciones no se limitaron a los comercios de juguetes. El incremento en el precio de las roscas no impidió que decenas de capitalinos buscaran adquirir panes de este tipo para partirlos en familia.
En panaderías como El Globo o La Ideal, localizadas en calles del Centro Histórico, se vio entrar y salir a decenas de personas con roscas en mano, la mayoría de ellas de tamaño familiar.
También se vieron largas filas ayer en el Palacio Postal, donde cientos de niños, muchos sonrientes y ansiosos, aprovecharon las últimas horas antes de la llegada de Melchor, Gaspar y Baltasar para escribir sus cartas y meterlas al buzón.
Y en la explanada del Monumento a la Revolución, miles hicieron fila para tomarse la fotografía en alguno de los distintos stands junto a los tres Reyes Magos y otros personajes.