Un choque, una contaminación por hongos, un claro deterioro. Lo que muchos vaticinaban cuando se colocó el ahuehuete en Paseo de la Reforma se cumplió. Este día, la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México, a través de su titular, Marina Robles, informó lo inminente: el ahuehuete será sustituido por otro.
Otro ejemplar llegará a la glorieta y el que se encuentra actualmente en una de las principales avenidas de la CDMX, será trasladado al vivero Nezahualcóyotl. Su historia, desde la colocación, estuvo llena de polémicas y tropiezos.
El choque a tres días de su instalación
Fue en junio del año pasado cuando decenas de ciudadanos le dieron la bienvenida a este ahuehuete que desde finales de marzo estará en rehabilitación durante uno o dos años. Procedente de Nuevo León, el ahuehuete alcanzaba una altura de 12 metros y sustituía a la palma que había ocupado ese lugar por más de 100 años.
Tres días después, sucedió lo que pareciera marcó el destino del árbol: un BMW se impactó en la glorieta en donde había sido plantado el ahuehuete, en cuyo lugar se habían realizado protestas previas por parte de activistas que pedían que ahí se colocara una figura en memoria de los y las desaparecidas en el país. El ahuehuete de 20 años de edad, comenzaba con tropiezos su nueva vida en la Ciudad de México.
Sufre de estrés
Luego de darse a conocer que el ahuehuete estaba seco, no sólo por los ciudadanos que reportaban con fotografías en redes sociales, sino también por personalidades del espectáculo como Eugenio Derbez, la Dirección del Sistema de Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental, explicó que el ahuehuete, a poco más de un mes de haber sido instalado, se encontraba pasando por un proceso de estrés.
"El ahuehuete aún se encuentra en un periodo de adaptación, en un estado dormante, con un retiro de hoja entre 60 y 70 por ciento debido a un proceso de estrés fisiológico que lo obligó a quitar sus propias hojas para evitar la pérdida de agua y nutrientes en su tronco", declaraban las autoridades de Áreas de Valor Ambiental. El choque impactó con uno de los tensores colocados para mantenerlo hasta que se lograra su pleno enraizamiento, se movió a causa del impacto y le generó una situación de estrés.
Los hongos en sus raíces
Para noviembre y por si no fuera poco para este ahuehuete, especialistas de la Secretaría del Medio Ambiente detectaron la presencia de tipos de hongos, tres en específico, los cuales afectaban sus raíces y retrasaban con esto su proceso de adaptación a su nuevo hogar.
"Tres hongos del género Fusarium, Rhizoctonia y Verticillium" se encontraron en las raíces del ahuehuete y aunque no fue grave, lo que sí hicieron fue "pudrir el tejido radicular que impide que el árbol pueda suministrar o absorber el agua y los nutrientes que existen en el suelo, ese es el nivel de ataque que puede provocar este hongo", indicaba en su momento el subdirector de Proyectos en Infraestructura Verde de la Sedema, el ingeniero Isidro Recillas Silva.
Su sustitución: el fallo inminente
Saúl Alcántara, experto en conservación de jardines de la UNAM, declaraba hace unas semanas al diario El País, que su mudanza era inminente pues, a estas alturas y con todo lo que le pasaba, era imposible que el ahuehuete tuviera un rebrote. "Ya es demasiado tarde, el árbol ya no tiene vida", indicó.
Este día, la secretaria del Medio Ambiente de la Ciudad de México, Marina Robles, informó que el ahuehuete será trasladado de Paseo de la Reforma al vivero Nezahualcóyotl y que, aunque sigue vivo, será otro ejemplar el que lo reemplace. Será el hermano de este ahuehuete el que reemplace al que sigue ubicado en Reforma y que su tiempo de adaptación estará delimitado a seis meses para evitar que patógenos vuelvan a afectarlo.
A finales de marzo está programado el traslado de este ahuehuete del que, desde un inicio, parecía estar escrito su destino.
