El secretario de Gobierno de la Ciudad de México, Ricardo Ruiz, aseguró que retirar el plantón por agua contaminada en la alcaldía Benito Juárez, no es la solución al problema, por lo que prometió respetar la decisión de los vecinos.
Posterior a conferencia de prensa, el funcionario fue cuestionado respecto al repliegue del bloqueo y negó que estuviera contemplado por parte de las autoridades.
“No lo hemos planteado, no creemos que sea la forma de resolver, más bien será seguir atendiendo a los vecinos, y que ellos sean los que nos digan cómo caminar”, dijo.
Añadió que también se ha atendido a personas afectadas de Benito Juárez que no forman parte del plantón para dar respuestas a sus demandas y prometió que seguirán de esa manera; recordó que ayer se reunieron 25 vecinos líderes, “seguiremos nosotros con los vecinos y con la información real que soliciten, todo el tiempo”, resaltó.
Ruiz Suárez agregó que la planta purificadora el Jardín San Lorenzo en la alcaldía Benito Juárez, está trabajando a partir de este domingo. Además, mencionó que las carpas que hay en el plantón fueron instaladas por legisladores del PAN, a quienes acusó de usar el caso como campaña electoral.
En tanto, el Jefe de Gobierno, Martí Batres, justificó que el Sistema de Aguas (Sacmex) ya realiza la limpieza de la red hidráulica para su tratamiento, sin embargo, los vecinos no tienen claro el origen del problema.
“Se van descartando hipótesis y posibilidades a través de la investigación técnica correspondiente, y se va a seguir haciendo esta investigación; nos ayuda Pemex y hay otras áreas que están ayudando a esta investigación que va a continuar”, expresó.
Batres detalló que Pemex analizó la zona para descartar fisuras al interior de la red, además, se verificó que el lugar dónde hubo huachicoleo en 2015 continúa sellado.
El director general de Pemex, Javier González del Villar, comentó que se realizaron nuevas pruebas que arrojaron que se trata de una mezcla de aceites y otros componentes degradados.
Dijo que para llegar a la conclusión se realizaron pruebas de hermeticidad y de inspección al interior del ducto de 500 metros y no se encontró ninguna fisura o toma clandestina.
JVR
