Y reclaman justicia para las víctimas

Exigen al IPN no reinsertar a Diego “N” como alumno

Estudiantes piden castigo para el joven acusado de agredir a mujeres al modificar sus fotos mediante IA; autoridades de la institución ofrecen instalar una mesa de diálogo

Las inconformes expusieron sus demandas en cartulinas, durante la manifestación realizada afuera de la Escuela Superior de Comercio y Administración, ayer.
Las inconformes expusieron sus demandas en cartulinas, durante la manifestación realizada afuera de la Escuela Superior de Comercio y Administración, ayer. Foto: Especial

Víctimas de Diego “N”, el exestudiante del Instituto Politécnico Nacional (IPN) que supuestamente modificó fotografías para crear contenido sexual con Inteligencia Artificial y comercializarlo en la web, y activistas, se manifestaron ayer afuera de la Escuela Superior de Comercio y Administración (ESCA) para exigir a la institución que evite la reinserción como alumno del acusado.

En punto de las 14:00 horas, las afectadas, acompañadas por sus compañeras y por integrantes de colectivos feministas, gritaban: “No, no, no, Diego N libre no”, además de que cargaban pancartas con las leyendas: “Si no hay justicia, hay revolución” y “Exigimos justicia para las víctimas, no impunidad para los agresores”, entre otras.

“Este mensaje también es para todas las autoridades del Instituto Politécnico Nacional, el día de hoy se va a entregar un pliego petitorio en el que se van a abordar algunos puntos con base en el caso de Diego ‘N’; exigimos que de manera inmediata se den medidas para garantizar la seguridad, dignidad y apoyo para todas las alumnas víctimas de este caso”, comentó una de las asistentes.

La mujer explicó que la reinserción de Diego “N” en el IPN representaría la revictimización para las víctimas y una amenaza directa para el resto de las mujeres, lo que generó la preocupación y solidaridad de varias alumnas, quienes se sumaron a los reclamos en contra del juez Francisco Salazar Silva, por fallar a favor del acusado en dos de las causas penales, el pasado 4 de diciembre.

Las inconformes consideraron que Francisco Salazar Silva se convirtió en un cómplice del agresor, y sostuvieron que el impartidor de justicia revictimizó a las afectadas, además de que, con sus decisiones, promovió de manera indirecta la no denuncia para otros casos, al interpretar que al tratarse de un tema digital no hay castigo, lo que podría desmotivar a otras víctimas y llevar a que, en consecuencia, este tipo de delitos se vuelvan a cometer y se normalicen.

Como parte de la protesta, las manifestantes expusieron que las agredidas sufrieron daño emocional y psicológico, así como afectaciones en los ámbitos escolar, laboral y social, entre otros.

“El sistema de justicia judicial nos ha fallado, no sólo a nosotras, sino a todas las mujeres que han sido violentadas en el ámbito digital”, reclamó una de las participantes en la concentración.

Autoridades del IPN acudieron al lugar de la protesta y propusieron a las inconformes establecer una mesa de diálogo para atender sus inquietudes, con lo que se dio por terminado el acto.

Cabe recordar que la primera denuncia por una víctima de Diego “N” fue presentada el 6 de octubre del 2023, y luego se añadieron otras siete, por lo que, el 26 del mismo mes, elementos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) detuvieron al joven señalado en su domicilio, ubicado en la alcaldía Álvaro Obregón.

Tras las investigaciones, se descubrió que el señalado tenía en su iPad alrededor de 166 mil fotografías y 22 mil videos, y entre ellos había pornografía infantil, por lo que se abrió una investigación por este delito, y gracias a dicha carpeta es que no salió libre cuando el juez Francisco Salazar lo absolvió, en el caso de dos de las víctimas.

Al terminar la audiencia realizada el pasado 4 de diciembre, en la que Diego “N” quedó libre de cargos en dos de las denuncias que enfrenta, Valeria Martínez, abogada de las víctimas, anunció que apelará la resolución del impartidor de justicia.

De esta manera, el caso será turnado a una de las salas del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México y podría llegar incluso a la justicia federal, si la defensa decide recurrir a una demanda de amparo.