En 2021 el Instituto para la Seguridad de las Construcciones en la Ciudad de México (ISC) advirtió que el edificio de la Plaza Izazaga 89, que ha cumplido un mes de cierre por la venta de mercancía ilegal, tenía sobrepeso en niveles superiores, daños estructurales y no era usado para oficinas, como establecía el permiso, “lo cual puede derivar en un comportamiento estructural indeseable durante un evento sísmico importante”.
La Cédula de Inspección Post Sísmica Rápida obtenida por La Razón vía transparencia detalla que el inmueble ubicado en la colonia Centro, de la alcaldía Cuauhtémoc, está autorizado para uso de oficinas y el peso máximo por metro cuadrado para este tipo de uso es de 250 kilogramos por metro cuadrado, pero en pisos altos había cerca de 350 kilos.
“Será necesario revisar de manera cuantitativa la seguridad y estabilidad estructural de la edificación, de conformidad con lo establecido en el Reglamento debido a que se han incrementado significativamente las cargas originales destinadas a uso de oficinas, debiendo asentarse en el dictamen técnico de estabilidad o de seguridad estructural suscrito por un Corresponsable de Seguridad Estructural”, indica el documento con fecha del 9 de septiembre de 2021 y firmado por director general del instituto, Renato Berrón Ruiz.
Brugada promete dar continuidad al legado de Sheinbaum en la CDMX
El edificio conocido como México Mart, localizado en la avenida José María Izazaga 89, cumplió ayer un mes sin actividades comerciales luego de que personal del Instituto de Verificación Administrativa retiró los sellos de suspensión el 12 de diciembre pasado.
Esto ocurrió luego de que el 28 de noviembre, elementos de la Secretaría de Economía federal, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, así como de la Marina e instituciones capitalinas, implementaron el Operativo Limpieza en el lugar y decomisaron 262 mil 330 productos que entraron a México de manera ilegal; además, no tenían las licencias de marcas como Disney, Sanrio, Marvel, Nintendo, entre otras.
Dos días después, y tras el anuncio de extinción de dominio del inmueble, la plaza cerró “hasta nuevo aviso” y los comerciantes sacaron los productos de los que sí tenían documentos. Actualmente el lugar, que cuenta con 15 niveles, es vigilado por autoridades capitalinas y no se permite la entrada a nadie.
El documento del ISC además detalla que, derivado del sismo de magnitud 7.1, del 7 de septiembre de 2021, el nivel 15 de la plaza tuvo desplazamientos de 15.7 centímetros, con dirección paralela a Avenida Izazaga, así como de 9.2 centímetros en dirección perpendicular; además, valores máximos de aceleraciones de 187 y 123 centímetros, respectivamente.
“El nivel de daño observado en elementos no estructurales no desligados corresponden con el nivel de daño esperado, que consistió principalmente en agrietamientos de muros de mampostería y rotura de cristales localizados sobre ejes paralelos a la avenida J.M Izazaga, así como ligeros daños en algunos acabados”, indica el dictamen.
El documento muestra imágenes de grietas en nervaduras del sistema de piso en la azotea, así como daño de uniones de elementos estructurales y no estructurales,
La autoridad aclaró que no había daños graves en el inmueble, por lo cual se dictaminó como de “riesgo bajo”; no obstante, emitió una serie de recomendaciones.
En el dictamen, el ISC sugirió implementar un programa de mantenimiento preventivo y correctivo con particular atención en el sistema de piso, por lo que recomendó inyectar las grietas y fisuras, mejorar la impermeabilización e implementar un Programa Interno de Protección Civil que considere el uso actual del edificio.
“Será necesario revisar de manera cuantitativa la seguridad y estabilidad estructural de la edificación, de conformidad con lo establecido en el reglamento debido a que se han incrementado significaticamente las cargas originales destinadas a uso de oficinas” indica el dictamen.
Además, la autoridad capitalina consideró necesario añadir muros de concreto para mejorar el comportamiento estructural del edificio en caso de un sismo de magnitud alta.
El pasado 3 de diciembre, la Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, dijo que intensificará las acciones para combatir la venta de mercancía pirata con el objetivo de garantizar la legalidad y recuperar los espacios públicos en la Ciudad de México, pero no mencionó nada respecto a la seguridad del inmueble.
“Debemos garantizar la legalidad en cada uno de los comercios. Durante esta temporada, una de las tareas prioritarias es evitar el crecimiento descontrolado de comercios en vía pública, especialmente en el Centro Histórico, donde el desafío principal es organizar y recuperar los espacios públicos pendientes”, destacó.
Brugada Molina aseguró que no se trata de una acción dirigida contra productos de origen chino, sino que se aplicará en contra de quien comercialice mercancía ilegal, independientemente de la nacionalidad que tengan.
El secretario de Gobierno, César Cravioto Romero, señaló que fue la Secretaría de Economía federal la que llevó a cabo la revisión e incautó más de 260 mil piezas de mercancía que ingresaron al país de manera ilegal.
La Secretaría de Gobierno, el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil y la Consejería Jurídica y de Servicios Legales colocaron sellos de suspensión de actividades en el inmueble, luego de verificar que el propietario no contaba con la documentación necesaria para unir dos predios.
“No existía el permiso para unir los inmuebles, por lo que el Invea procedió a suspender las actividades del lugar. Una vez que el propietario cumpla con los trámites requeridos, se levantará la suspensión y el inmueble podrá operar nuevamente”, explicó Cravioto Romero.
Actualmente, desde el exterior, el interior luce vacío y no hay vendedores, quienes esperan su pronta apertura.