La diputada local Alessandra Rojo de la Vega renunció este miércoles a su militancia en el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) porque sus convicciones ya no coinciden con las suyas, y por traicionar los acuerdos de no usar las causas de feministas en el pasado proceso electoral.
“Hoy me voy del Partido Verde por congruencia, porque me sentí usada, porque no tengo amigos, porque todo lo que hice, lo hice sola”, señaló en una transmisión en vivo en su cuenta de Instagram, donde aclaró que continuará su carrera en la sociedad civil, sin integrarse a un partido, por el momento.
A la par, publicó en Twitter una carta a la prensa, donde la legisladora de la Ciudad de México explicó de manera breve los motivos que la orillaron a salir del PVEM a partir de este 9 de junio del año en curso.
“He decidido renunciar al Partido Verde Ecologista de México porque no tengo duda que sus convicciones no coinciden con las mías. Además, de que en el proceso electoral hicieron caso omiso a mis recomendaciones sobre no usar las causas y las luchas que he encabezado, y que inmiscuyen el dolor de mujeres víctimas de violencia”, agregó.
Rojo de la Vega abundó que el Verde traicionó los acuerdos “y por ir en contra de las normas legales y morales. No debemos callar, ni voltear la cara ante lo que vivimos en el proceso electoral”, dijo.
Hizo un llamado a usar el poder que se tiene de comunicar para decir la verdad “y no ocultar a los verdaderos culpables que instrumentaron lo que para muchas personas fue un atropello a la democracia”.
Reveló que ya se sentía incómoda en el Partido Verde, pues “nunca conté con el respaldo de nadie, inclusive nadie del partido”.
En la transmisión, Alessandra Rojo de la Vega confesó que hasta ahora estaba bloqueada en el PVEM, incluso las personas que consideraba sus amigos como el líder en la Ciudad de México, Jesús Sesma, ya ni le dirige palabra, sin saber el motivo de esa actitud.